Tras la muerte de Jorge Mario Bergoglio, medios internacionales comienzan a informar los nombres de los posibles candidatos para ocupar el máximo cargo de la Iglesia Católica.
Tras la muerte del Papa Francisco a los 88 años, medios internacionales comienzan a informar los nombres de los posibles candidatos para suceder el máximo cargo de la Iglesia Católica.
Jorge Mario Bergoglio asumió como sumo pontífice el 13 de marzo de 2013, marcando un hito al ser el primer latinoamericano en conseguir este grado.
El líder eclesiástico murió este lunes 21 de abril a las 7:35 horas, luego de varios días con complicaciones de salud. Su última aparición pública ocurrió ayer domingo, cuando deseó "Feliz Pascua" desde el balcón de la Basílica de San Pedro.
The College of Cardinals Report, plataforma especializada en seguir los procesos dentro del Vaticano, afirmó que son 12 los cardenales que se perfilan como candidatos para suceder al Papa Francisco.
Robert Sarah (79): Prefecto Emérito de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos - Nacionalidad: Guinea.
Malcolm Ranjith (77): Arzobispo Metropolitano de Colombo, Sri Lanka - Nacionalidad: Esrilanqués.
Fridolin Ambongo Besungu (65): Arzobispo de Kinshasa, República Democrática del Congo - Nacionalidad: Congoleño.
Anders Arborelius (75): Obispo de Estocolmo, Suecia - Nacionalidad: Suizo.
Charles Bo (76): Arzobispo de Yangón, Myanmar - Nacionalidad: Birmano.
Jean-Marc Aveline (66): Arzobispo Metropolitano de Marsella, Francia - Nacionalidad: Argelino.
Tras el fallecimiento de un papa, el Vaticano decreta 9 días de luto y se debe organizar el Cónclave para la elección del nuevo sumo pontífice, que se llevará a cabo dentro del territorio de la Ciudad del Vaticano, en espacios específicos y restringidos al acceso de personas ajenas al proceso.
El derecho de elegir al nuevo pontífice corresponde exclusivamente a los Cardenales de la Santa Iglesia Romana, con la excepción de aquellos que hayan cumplido 80 años antes del fallecimiento del papa. El número de Cardenales electores no puede exceder los ciento veinte.
Para que la elección nuevo papa sea válida, se requiere el voto favorable de al menos dos tercios del total de electores presentes.
Los cardenales votan repetidamente hasta que se alcanza una mayoría de dos tercios. En caso de que una votación termine sin una mayoría clara, el humo es negro. Cuando se alcanza una decisión, el humo es blanco.