19 estudiantes y dos profesores fallecieron producto del ataque perpetrado por un joven de 18 años, quien se atrincheró con un rifle en una sala del colegio Robb Elementary.
Sin embargo, las víctimas aumentaron a 21 conforme pasaron las horas, ya que 19 niños y dos profesores fallecieron producto del ataque.
Además, se informó que todos ellos se encontraban en una misma clase, en la cual se atrincheró el atacante y disparó indiscriminadamente contra los presentes, informó este miércoles la Policía.
En declaraciones a los medios, el portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Chris Olivarez, explicó que el agresor disparó contra su abuela en casa, luego se montó en un vehículo y tuvo un accidente en las cercanías de la escuela Robb Elementary.
Fue en ese momento cuando las fuerzas de seguridad recibieron las primeras llamadas de alerta, indicando que un individuo armado se dirigía hacia el colegio. Cuando la policía llegó al edificio, el agresor abrió fuego contra los agentes y finalmente fue abatido.
El autor del tiroteo fue identificado el martes como Salvador Ramos, ciudadano estadounidense de 18 años, residente en Uvalde y que iba armado con un rifle.
A primera hora del miércoles, todas las víctimas mortales ya habían sido identificadas y sus familias notificadas, y algunas de ellas revelaron a los medios los nombres de sus hijos fallecidos en el tiroteo.
El portavoz de la Policía indicó que aún están investigando si la escuela era un objetivo premeditado del atacante o si accedió al edificio dada su cercanía con el lugar donde tuvo el accidente de tráfico.
También se entregaron nuevos detalles sobre Ramos, quien vivía con sus abuelos, no tenía empleo, fue alumno en un instituto de secundaria local, no tenía amigos ni pareja. La Policía no tiene conocimiento de que formase parte de ninguna banda.
Pese a haber recibido los disparos de su nieto, la abuela de Ramos sigue viva, y las autoridades están tratando de localizar al abuelo.