Rodeado de miles de personas en la Alameda, el presidente electo le habló por primera vez al país. En la instancia, reflexionó sobre los desafíos que enfrentará su gobierno y aseveró que "nunca, por ningún motivo, podemos volver tener un presidente que le declare la guerra a su propio pueblo".
El candidato a La Moneda de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, consiguió vencer en las urnas a la carta del Frente Social Cristiano, José Antonio Kast, y convertirse así en el presidente electo de Chile. Con un saludo en mapudungun, Boric agradeció a su familia, su equipo de campaña, a la Dra. Izkia Siches, a Irina Karamanos , su pareja, y a "los chilenos y chilenas que fueron a votar, honrando su compromiso con la democracia". Del mismo modo, sostuvo: "A las personas que quisieron asistir a votar y no pudieron hacerlo por falta de transporte público, no puede volver a ocurrir que en un día tan importante se prive a la gente de ejercer su derecho a voto", recordando los problemas de transporte público que marcaron la jornada. Asimismo, pidió a sus adherentes mantener el compromiso y convicción "para que todas y todos podamos sostener el proceso de cambio". En tanto, reflexionó sobre las luchas sociales que han marcado su agenda política: "La no discriminación y detener la violencia contra las diversidades y las mujeres, junto a las organizaciones feministas, va a ser fundamental". En materia de economía, Boric dijo que "un crecimiento de desigualdad profunda tiene pies de barro. Sólo con cohesión social, reencontrándonos y compartiendo un piso común, podemos avanzar a un verdadero desarrollo sostenido". Por otro lado, recordando los tiempos de estallido social, Boric manifestó que "mi compromiso es cuidar la democracia todos los días de nuestro gobierno. Nunca, por ningún motivo, podemos volver tener un presidente que le declare la guerra a su propio pueblo". En ese punto, le dijo a las víctimas de violaciones de Derechos Humanos: "No nos cansaremos de buscar verdad, justicia, reparación y no repetición".