El integrante del equipo verde se acercó hasta las cocinas del azul para darle un regalo que no le quitó la sonrisa del rostro a la ganadora de la primera temporada del programa.
¡El amor está en el aire en las cocinas de El Discípulo del Chef! y Max Cabezón y Miel Blanca bien lo saben.
Lo anterior quedó comprobado con el romántico gesto que tuvo el ex MasterChef en el capítulo de este martes.
Es que Max se acercó hasta la cocina del equipo azul para regalarle un chocolate a la ganadora de la primera temporada del programa, quien quedó muy contenta con el obsequio.
"El beso, el beso", gritaban sus compañeros mientras veían la escena.
Consultado por Daniela Castro, el integrante del equipo verde le dijo que "me fue bien. Recibí una linda sonrisa, una linda mirada y sentí el cariño".
Por su parte, Miel señaló que "se la está jugando, qué bueno, me gusta. Me encanta, lindo Max. Lindo que trae esas cositas. Se la está jugando bien, pero se la tiene que seguir jugando bien".