La cantautora reflexionó sobre los cambios que ha tenido su vida tras convertirse en madre de Joel, su primer y hasta ahora único hijo. "Conocí a una nueva versión de mí", afirmó.
Mon Laferte contó cómo ha cambiado su vida desde que se convirtió en madre de
Joel, su primer y hasta ahora único hijo con su esposo
Joel Orta.
La reconocida cantante se refirió a esta nueva etapa junto a su pareja, con quien contrajo matrimonio en octubre de 2022 en una íntima ceremonia en
Tepoztlán.
"Bueno, en realidad yo hice las cosas al revés,
primero tuve a la guagua y después me casé", dijo en entrevista con
LUN, agregando que "todo este proceso ha sido bello
, yo quería ser madre hace muchos años".
La multiganadora de premios Grammy reconoció que llegar a ser madre
"no fue tan fácil", ya que debió someterse a una serie de tratamientos hormonales para poder lograrlo.
"
Antes no quería ser mamá y de repente un día me empezó ahí el bichito de la maternidad. Y bueno, encontré un gran compañero, que es mi mejor amigo. Ha sido lindo", agregó.
Los cambios de Mon Laferte tras convertirse en madre
"Ha sido todo un viaje la maternidad", confesó la intérprete de
Tu Falta de Querer al ser consultada sobre los cambios en su vida tras convertise en madre de Joel.
Al respecto, sostuvo que "no te enseñan a ser mamá, entonces
al principio me estaba volviendo un poco loca".
Por otra parte, reveló que algunas canciones de su reciente disco
Autopoiética tocan este tema. Dentro de ellas se encuentra
Mew Shiny, tema en español e inglés que plantea un conflicto a lo hora de asumir este nuevo rol.
"Esta canción habla un poco, por ejemplo, sobre que me alejé mucho de mi compañero (esposo) al principio, porque
empezamos a ser solo papás y dejamos de ser pareja", detalló.
Pese a lo anterior, la cantautora reconoció que ha disfrutado ser mamá y que pudo conocer "una nueva versión" de ella. "Siempre dentro de nosotros existen muchos yo. Muchas mujeres conviven aquí y esta era una que no conocía: la mamá. Y
me cae bien esta versión", dijo.
"Es muy loco, como que
me doy cuenta que ya nunca más voy a poder descansar. Más que descansar, es paz la palabra. Por más que mi hijo sea cuidado por el papá y esté bien, todo el tiempo mi cabeza está pendiente de algo en relación a él. En que le falta esto, que esto otro, que el pañal, que la comida. Y así todo el tiempo", agregó.
En esa línea, recordó algunos comentarios que ha recibido de mujeres mayores que ella: "
Me han dicho que eso no se termina, porque tu hijo va a tener 20, 30 años, y tú vas a seguir pensando si está bien, si no le falta esto o lo otro".
"Entonces,
ya nunca más habrá completa paz. Bueno, pues será así nomás", cerró la artista.