Las imágenes grabadas por los testigos del suceso dieron cuenta de la pérdida de los estribos del ex futbolista, quien no pudo dirigir en la vuelta debido a que había sido expulsado en el primer encuentro.
Atlético San Luis derrotó por 4-2 en tiempo extra a los Dorados de Sinaloa, equipo dirigido por Diego Armando Maradona. Este resultado permitió que conquistaran el título de la Liga de Ascenso del fútbol mexicano al ganar la serie final por 4-3, y de paso, acabar con el sueño del argentino de consagrase campeón.
En la ida los Dorados habían ganado por la mínima y llegaban con la primera opción de alzarse con el título. Sin embargo, no fue así. Uno de los factores que incidió en la derrota de su equipo fue la expulsión del "10" en el primer cotejo por reiterados reclamos al cuarto árbitro, sumado a que ingresó al campo de juego. Es por esto por lo que se vio obligado a ver el partido desde la caseta de transmisión.
Lee también: Maradona alabó a Mou, cuestionó a Pep y defendió a Messi: “Había jugadores que iban 20 veces al baño, pero nunca me referí a Messi”La forma cómo terminó el partido, no obstante, fue noticia aparte y opacó al flamante campeón. Luego del pitazo final la "pulga" se encontró con la hinchada rival en un sector de la tribuna preferencial, donde le comenzaron a gritar: "Se la come, Maradona se la come".
El “pibe de oro” se descontroló y comenzó a empujar y ofrecer golpes a los forofos. Su equipo de asistencia trató de frenarlo y lo ingresaron rápidamente a un ascensor.
Las grabaciones de los testigos dan cuenta de cómo Diego ofrecía golpes a los fanáticos contrarios. Todo mientras lanzaba insolutos de grueso calibre y los guardias personales trataban frenarlo.
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