La iniciativa aprobada en el Senado, señala que las máquinas de azar constituyen en sí juegos de azar, por lo que están legalmente prohibidas con la sola excepción de su funcionamiento en los casinos de juego.
Los conocidos tragamonedas que pueden ser vistos en almacenes de barrio, nuevamente surgen como tema de discusión a raíz del proyecto de ley que ya fue aprobado por el Senado y que ahora será discutido en la Cámara de Diputadas y Diputados. Una iniciativa que incorpora multas y penas de cárcel por su uso, pudiendo llegar hasta los 5 años de prisión. El proyecto señala que las máquinas de azar constituyen en sí juegos de azar, por lo que están legalmente prohibidas con la sola excepción de su funcionamiento en los casinos de juego. "Claramente es absolutamente discriminatorio. Es decir, tu sí puedes ir a gastar a los casinos, pero la gente no puede ir a un negocio cerca del barrio donde puede gastarse mil pesos o dos mil pesos", dice Ramón Sepúlveda, vicepresidente Fiden y representante de los fabricantes e importadores de estas máquinas. En caso de que se apruebe el proyecto tal como está, los locales deberán pedirles los permisos a la Superintendencia de Casinos y demostrar si son máquinas de azar o de destreza.