Estos llamados precursores químicos eran adquiridos mediante una empresa de fachada que transportaban el elemento en camiones hacia el norte del país para luego exportarlos a Bolivia, lugar donde la transformarían en al menos 7 toneladas de cocaína.
Mediante una investigación que involucró una interceptación telefónica por parte de la PDI, se logró identificar una empresa de fantasía compraba de manera industrial diversos elementos químicos, entre ellos el permanganato de potasio. Este era trasladado en camiones desde Santiago hacia el norte del país, para luego ser exportados a Bolivia, donde según la PDI elaboraban la cocaína. "Este químico tiene un valor aproximado de $300 mil y en el país de Bolivia, el avalúo es 10 veces mayor", explicó el comisario Jorge Guin, subjefe de Brigada Antinarcóticos Metropolitana. Los llamados precursores son químicos usados en elaboración de droga, pueden ser anestésicos para caballos o químicos para fabricación de plásticos, perfumes y municiones. Dos personas fueron detenidas tras la incautación de 1.000 kilos de este elemento, que se podrían haber transformado en toneladas de cocaína. Los sujetos quedaron en prisión preventiva, con un plazo de 90 días de investigación, por el delito de tráfico de percusores químicos.