En marzo del 2020 fue capturado Pablo Moya Olivares, un peligroso delincuente que abusó de al menos 10 mujeres en un lapso de solamente meses a principios del 2020, en las transitadas calles de Santiago.
Este individuo, que ya tenía antecedentes penales, se hacía pasar por taxista, utilizando el clásico vehículo negro con techo amarillo en el que raptaba a sus víctimas, realizándoles amenazas y hasta robándole sus pertenecías como celulares y tarjetas.
CHVNoticias accedió de forma exclusiva a audios del juicio de este individuo, quien
reconoció haber cometido estos delitos, aunque se justificó argumentando que siempre estuvo bajo los efectos de las drogas.
"Todos los delitos que cometí, andaba bajo los efectos de la droga. Eso lo reconozco", señaló.
Testimonios
Un equipo de nuestro canal conversó con dos de las víctimas de Moya Olivares, quienes relataron parte del calvario que sufrieron con este antisocial. Una de ellas, señaló que tomó con el taxi para ir hacia su trabajo.
Al subirse, notó que había una persona en el asiento delantero que sería nada menos que una cómplice. En cosa de segundos, el falso taxista detuvo el auto y admitió sus verdaderas intenciones.
"Se detiene y me dice que es asaltante y que le pase toda la plata que tengo". Eso no es todo. En un momento, el delincuente detuvo el automóvil para poder fumar y comenzó a darle besos en la boca a la mujer y tocarle sus partes íntimas.
En varios de estos casos, el detenido obligó a que le dieran sus claves para sacar plata en cajeros automáticos, para luego volver a sus constantes abusos.
Modus Operandi
La Fiscalía Centro-Norte acreditó que uno de los hechos más preocupantes es el de una persona de nacionalidad extranjera que estuvo retenida por más de 12 horas en el taxi, logrando escapar en un servicentro en plena noche.
"Del caso de las 12 horas. Una persona de nacionalidad mexicana, me acuerdo. Yo estando bajo los efectos del alcohol, ingiriendo drogas nasales y estupefacientes de pasta base, sigo la marcha. Ella desciende del vehículo y desaparece. Yo estando dentro de un pronto Copec y ahí desapareció y no la vi más".", reconoció.
Esteban Silva, persecutor a cargo de la investigación, señaló que Moya Olivares actuaba en un automóvil que no tenía taximetro por las calles de Santiago Centro, que tenía los vidrios polarizados y las puertas siempre cerradas.
Tras meses de investigación en los que se hizo hasta un retrato hablado, Carabineros dio con este peligroso antisocial tras analizar su patente y sus llamadas telefónicas.
El pasado 14 de diciembre Pablo Moya Olivares fue declarado culpable, mientras que este viernes 23 del mismo mes se conocerá su sentencia, donde el Ministerio Público solicita tres penas de presidio perpetuo calificado, es decir, que pase el resto de su vida en la cárcel.
21/12/2022
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