Constanza Capelli conversó con CHV Noticias antes debutar en el react de Got Talent Chile e hizo un repaso de su estadía en la casa más famosa del mundo. "Pasé por varias etapas emo", comentó.
A casi tres meses de ganar
Gran Hermano Chile,
Cony Capelli se sumará a un nuevo desafío en el
react de
Got Talent Chile junto a
Claudio Michaux. Importante paso que primero estuvo marcado por
situaciones de dulce y agraz en la casa más famosa del mundo.
Las peleas, los romances y las amistades, fueron tres factores que se configuraron paso a paso en los
seis meses de estadía que la llevaron a ser la ganadora del reality.
Experiencia que repasó en conversación con CHV Noticias y reveló aquello que la marcó para bien y para mal durante el transcurso del programa de
Chilevisión.
Lo mejor y lo peor de Gran Hermano
—¿Cuál fue el momento más duro del encierro?
—Como
peor experiencia, en el puesto número uno del podio, podría decir que fue la
pelea con Rai.
—¿Y cuáles fueron los mejores recuerdos?
—Lo mejor que me pasó fue la
visita de mi mamá, ese fue un muy buen momento.
Pero no es el único. Cony también destacó con especial cariño, en segundo lugar, cuando llegaron todos los ex jugadores y se quedaron una noche: "Fue muy especial porque entendí que
lo que yo estaba viviendo adentro no era lo que también pasaba afuera. Como que los chiquillos estaban súper resueltos con los problemas que habíamos tenido y eso me alivianó caleta, me dio mucha felicidad".
—¿Te arrepentiste en algún momento de haber entrado al reality por la exposición?
—Fue y ha sido algo muy cuático. Pasé por
varias etapas emo en mi vida actual, donde de repente digo "¿por qué hice esto si estaba tan bien en el preuniversitario?". Pero son sólo momentos.
—Cuando uno realmente se sienta a ver la realidad, comparado como era antes,
estoy haciendo lo que quiero. Cuando se te cumple un sueño, también dentro de ese sueño aparecen otros problemas. Entonces, claro, antes no tenía los problemas que tengo ahora y que es lidiar con un montón de exposición y hate, pero siempre estoy súper agradecida de mi realidad que, digámoslo como es, soy una persona acomodada comparado con el 80% de la población chilena que trabaja por un sueldo mínimo miserable.