La mujer mantuvo un romance de varios meses con el imputado, comunicándose a través de llamadas y mensajes de texto vía celular. La sentencia fue aplazada hasta noviembre para no interrumpir el vínculo maternal del menor.
Kerianne Stephens, de 26 años, es una funcionaria acusada de haber mantenido un romance ilegal con uno de los internos de la cárcel HMP Swaleside, en la isla de Sheppey en Kent, Inglaterra. El sujeto, Louis Tate, está condenado a cadena perpetua por el asesinato de un hombre.
Entre septiembre de 2018 y enero de 2019, la pareja mantuvo una relación en secreto a través de mensajes de texto y llamadas con un celular que Tate tenía en su celda, algo que también constituyó delito y el reo fue penalizado.
Tate, quien es el padre del niño, fue encarcelado de por vida con una condena mínima de 18 años en 2010 tras asesinar a Garry Frater, de 32 años y padre de tres hijos.
A lo anterior, se agregó lo más reciente, donde a Tate se declaró culpable de los delitos de mala conducta en cárcel pública de categoría B, y de transmisión no autorizada de imagen o sonido por comunicación electrónica.
Lee también: Al menos 4 detenidos por asesinato de profesor en Francia eran sus alumnosEn particular, el segundo cargo fue negado en su momento por la oficial Stephens, pero su amante sí reconoció lo sucedido en la misma audiencia, lo que generó discrepancia en las versiones de ambos.
La pena a cadena perpetua para el imputado de 36 años no fue a causa de un delito menor. Según informó BBC, el reporte del juicio señaló que Tate atropelló a su víctima con un Ford Fiesta en el año 2009, aplastándolo y dejándolo debajo del vehículo. Luego de eso, retrocedió y aceleró nuevamente para rematarlo.
En cuanto a Stephens, deberá conocer su veredicto en los próximos días, con fecha de plazo para el 12 de noviembre. El juez Philip Statman ya anticipó que la mujer enfrentará "una sentencia de custodia inmediata", pero que se considerará un trato especial pensando en el bienestar del menor, que por estos días está junto a su madre.