"Mejor que el dinero": Joven desempleada se encontró $278 mil, los devolvió al dueño y fue contratada
La mujer de 28 años iba caminando por la calle cuando se percató de un bolso tirado en el suelo, lo tomó y lo publicó en las redes sociales para encontrar a la persona que lo había extraviado. Dos días después, le dieron trabajo en una residencia de ancianos. "Fue un regalo de Dios", confesó.
Publicado por mmeza
Los buenos actos siempre tienen una recompensa, aunque sean desinteresados. Eso es lo que le ocurrió a una mujer desempleada en Brasil, quien se encontró un bolso con más de 278 mil pesos, la devolvió y fue contratada por un empresa.
Ocurrió en el centro de Jaboticabal, São Paulo, donde Jessica Caroline Barros (28) encontró la cartera con 1.740,25 reales, unos 278 mil pesos chilenos, y lo publicó en las redes sociales para dar con el paradero de la persona que lo extravió.
“Iba caminando, iba a pagar la cuenta, y cuando miré al piso vi la bolsita negra. Cuando la abrí, vi el dinero. Esperé un rato para ver si venía alguien, y nadie lo hizo. Cuando llegué a casa, publiqué y la gente comenzó a comentar”, contó Jessica a G1.
Luego de eso, el sobrino de la dueña del dinero, una mujer jubilada, vio la publicación y contactó a Jessica para concretar la devolución.
"Llegaron cuatro o cinco personas, diciendo que eran R$ 1.200, que la bolsa era de ella, que estaba borracha y no recordaba la cantidad. Su sobrino me mandó un mensaje por WhatsApp y me dijo la cantidad exacta, incluidos los centavos... Dije: 'Ah, entonces es de ellos'", recordó a mujer.
Un nuevo trabajo
Tras conocerse su historia, con el pasar de los días se dio a conocer que la mujer fue contratada por una residencia de ancianos, donde trabaja actualmente como cuidadora.
Así, luego de tres meses, encontró un trabajo. "Estaba haciendo depilación freelance. Era difícil pagar las cuentas. Y lo más difícil fue no poder ayudar en casa, porque somos yo, mi madre, mi abuelo, mis hermanos y un sobrino más", reveló.
"Fue un regalo de Dios, mejor que el dinero, porque el dinero se acaba y el trabajo da estabilidad", continuó.
Jessica encontró el dinero el 2 de enero y el día 4 ya tenía un nuevo trabajo.
"Las personas con actitudes así merecen toda la credibilidad y confianza. Los adultos mayores que tenemos aquí merecen todo el cariño, amor, atención y gente honesta, tal como lo fue Jessica. Su mérito y que Dios la siga bendiciendo", dijo Leandro Ferreira, quien la contrató.
“Es difícil encontrar gente honesta como Jessica. Si ella tuvo esa actitud allí, la tendrá cuidando a nuestros mayores”, cerró.