El sumo pontífice, quien asumió su cargo en marzo de 2013, tuvo su última aparición pública este domingo. Sin embargo, desde hace varios meses estaba afectado por problemas de salud.
El papa Francisco falleció a los 88 años de edad, tras padecer un complejo cuadro de neumonía.
Jorge Mario Bergoglio, nombre real del sumo pontífice, fue hospitalizado el pasado 13 de febrero debido a una infección polimicrobiana que afectaba a su sistema respiratorio. Luego, fue dado de alta con un evidente deterioro en su salud.
La muerte del sumo pontífice, que lideró la Iglesia Católica por más de 12 años, fue anunciada este lunes por el cardenal Kevin Farrell, camarlengo del Vaticano.
“Queridos hermanos y hermanas, con profundo pesar debo anunciar el fallecimiento de nuestro santo padre Francisco”, declaró el camarlengo en un comunicado. “A las 7:35 a.m., el obispo de Roma, Francisco, regresó a la casa del Padre. Dedicó toda su vida al servicio del Señor y de su Iglesia”, agregó.
De origen argentino y con un título de técnico químico, en sus inicios, Jorge Bergoglio fue ordenado sacerdote y superior provincial de los jesuitas en su país.
Debido a su espiritualidad y carácter, Juan Pablo II lo nombró obispo de Auca y Auxiliar de Buenos Aires, para luego convertirse en arzobispo y cardenal.
En marzo de 2013 y luego de la renuncia de Benedicto XVI, se celebró un cónclave que eligió a Bergoglio como el sumo pontífice, quien recibió el nombre de Francisco por el santo de Asís.
Durante su mandato del Vaticano, el papa Francisco pregonó y actuó a favor de movimientos sociales, en contra de la guerra y reestructuró ciertas normas de la Iglesia católica.