Durante la tarde de este viernes, finalmente el
Gobierno ingresó el
veto presidencial a la
Ley de Usurpaciones. Se trata modificar el proyecto ya aprobado por el
Congreso que busca elevar las medidas contra la toma de propiedades.
Ahora la
Cámara de Diputados y el
Senado deberán aprobar o rechazar el veto del Ejecutivo. Desde el inicio La Moneda criticó la
legítima defensa privilegiada, que da la posibilidad a personas de
usar la fuerza contra quienes usurpen su terreno.
La oposición ya se encuentra atenta para conocer los detalles del
veto presidencial, lugar de donde surgió la moción parlamentaria que terminó siendo despachada a ley.
Al respecto se refirió el
Presidente del Senado, Juan Antonio Coloma: "Si va a desnaturalizar y va a dejar parecido como era antes el tema de la usurpación o
la usurpación va a ser sancionada como una multa y no como si fuera un delito, vamos a tener un problema severo" expresó.
Para acoger el
veto presidencial se requiere de mayoría simple por lo que los votos de oficialismo no son suficientes, lo que ha obligado al
Gobierno a afinar hasta el último detalle para garantizar los respaldos necesario.