Sin saberlo, una detención tras una encerrona terminó dando con el líder de una organización que abordaba conductores, robaba los vehículos y, posteriormente, los vendía con papeles de otro, haciéndolos pasar como un automóvil sin orden por encargo.
Una banda de más 50 miembros dedicados al robo de vehículos fue desbaratada en la "Operación Manto", la que según Carabineros de Chile es la "organización más grande detenida en los últimos años"
En total fueron 70 vehículos los que pudieron ser recuperados, en su mayoría automóviles de alta gama robados mediante el método de la "encerrona".
Esta detención masiva de sospechosos se debe a un sólo sujeto, clave en la investigación, quien fue detenido en marzo pasado tras un portonazo en Chicureo en 2018. Al ser detenido y registrado se dio con su celular.
La Fiscalía de Alta Complejidad Occidente llevaba meses investigando sujetos que robaban vehículos, compraban otros con pérdida total en remates y así conseguían una nueva identidad para el que fue robado.
Así, tras tener acceso a los mensajes y llamadas realizadas por el detenido, se descubrió que era el líder de una increíble organización: él era quien pedía qué vehículos robar, detallando modelo, marca y más.
Lee también: Tres personas fallecieron tras ser atropelladas en el Maule: Conductor escapó y dejó botado el vehículoOcho meses después de esa azarosa captura, se logró dar con la identidad de 59 sujetos que estarían involucrados en esta banda delictual, además de la detención de quienes compraron de buena fe los automóviles que habían sido robados.
Asimismo, los mensajes no tenían anuncios de horas en que los sujetos realizaban los asaltos, pero tras el análisis de Carabineros se logró descubrir que ocupaban el código "manto" para indicar una referencia sobre cuándo harían estos atracos. En este caso, "manto" significaba cuando caía la noche. De ahí el nombre de la operación.
De los supuestos miembros de la banda, 17 fueron considerados los cabecillas de la organización. Ellos serían imputados de los delitos de asociación ilícita, lavado de activos, uso fraudulento de documentos públicos y privados, y robo con intimidación.
Además de recuperar los vehículos, en las decenas de allanamientos realizados por funcionarios de Carabineros se halló droga, armas y dinero en efectivo.
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