Antes de fallecer, Constanza Parra le envió un mensaje a su pololo, quien había salido a trabajar como delivery en la madrugrada, en el que pedía que la llamara lo antes posible o sino iba a morir.
Un
enigmático caso aún sin resolver tiene como víctima a una
joven de solo 22 años embarazada que murió en medio de un incendio en una toma de
San Antonio.
Su madre insiste en que
no fue un accidente y que hay terceros involucrados, mientras que la pareja la joven aseguró que
"no soy un asesino".
Antes de fallecer,
Constanza Parra le envió un mensaje a su pololo en el que
pedía que la llamara lo antes posible o sino iba a morir. Ese día, el hombre salió de la casa a las 3 am para trabajar como delivery y le escribió que, en caso de cualquier cosa,
lo contactara.
La pareja de Constanza comentó a
Contigo en la mañana que el día de la tragedia,
salió a entregar un reparto de un emprendimiento que tiene junto a su hermana y que casi 1 hora y 40 minutos después
recibió su mensaje de auxilio.
"Yo estaba en 21 de mayo, a las 4:27 am, esperando que
saliera algún pedido para poder hacer plata y me llamó... la llamé, fueron 7 minutos y fracción que
estuve escuchando sus gritos de auxilio, de ayuda y yo no pude hacer nada para llegar a tiempo a la toma... cuando llegué, la casa ya estaba prácticamente consumida", dijo Diego Ampuero.
Sin embargo, la madre de la víctima,
Sandra González, no cree su versión y asegura que fue un
incendio intencional con ayuda de terceros.
En conversación con el matinal de
Chilevisión, Ampuero aseguró que ese día salió porque
"teníamos que hacer plata con Cony porque su mamá le había pedido la casa que le regaló".
Tras la llamada de auxilio, Ampuero le pasó el teléfono a su hermana, quien a la vez llamó a Bomberos para que llegaran al lugar a combatir la emergencia y luego a la madre de Constanza, quien le habría dicho
"que salga de la casa, como es tan hueona".
"Intenté hacer mil cosas,
los vecinos me corrían porque yo estaba intentando meterme de cualquier forma a esa casa", comentó entre lágrimas.
Por su parte, Sandra González señaló que "como mamá, lo único que le pido a él
es que diga la verdad y él sabe que yo siempre tengo como ese sexto sentido, porque lo que hicieron con mi hija
no tiene perdón en la vida (...) yo sé que hay justicia y no estoy sola".
"Los Bomberos sacaron a mi hijo para que no se quemara para rescatar a su hermana... y eso la gente lo vio (...) todo lo que está diciendo es una mentira falsa (...)
él le daba mala vida a mi hija, le pegaba, la tenía muerta de hambre", insistió.