La integrante de la comisión de Armonización también expresó no estar de acuerdo con la norma transitoria de quórum de 2/3 para que el Congreso pudiera modificar el texto, en caso de ser aprobado. "Es necesario dejar funcionar a las instituciones democráticas", explicó.
La vicepresidenta adjunta de la Convención Constitucional (CC), Bárbara Sepúlveda, habló este lunes del presente y los desafíos que tiene el órgano que se encuentra en los últimos días de trabajo, a casi un mes de que entregue el borrador con la propuesta de nueva Constitución.
Al respecto, la integrante de la comisión de Armonización comentó en Radio ADN que el texto "es muy complejo, abarcó muchos niveles", por lo que en la instancia que tiene como fin estructurar el documento saben que su misión es volverlo más fácil de leer para la ciudadanía.
"Hemos asumido que debe ser traducido a un lenguaje más sencillo", aseguró la convencional PC electa por el distrito 9.
En tanto que por el fondo del contenido del borrador constitucional, la fundadora de la Asociación de Abogadas Feministas (Abofem) apuntó que "el texto actual no sólo es más democrático, sino que abre más posibilidad para que todas las discusiones entren".
Además, al ser consultada por la percepción ciudadana del trabajo de la CC y los resultados que han arrojado las encuestas a casi 3 meses del plebiscito de salida, donde las personas deberán aprobar o rechazar la propuesta, la abogada y ex directora ejecutiva del Observatorio contra el Acoso Callejero expresó que espera que el respaldo aumente cuando se de a conocer el trabajo finalizado.
"A medida que se vaya dando a conocer el texto con mayor profundidad, lo lógico es que vaya subiendo el apoyo", declaró.
Sepúlveda también expresó su posición sobre la propuesta de los 2/3 necesarios para que el Congreso pueda modificar la nueva Constitución (lo que sería aplicado hasta el 2026), en caso de que sea entre en vigencia, norma que fue aprobada el viernes por la Comisión de Normas Transitorias pero que aún debe pasar al pleno de la CC.
“Me parece innecesario. Creo que es comprensible una postura dentro de la Convención, que refleja la ciudadanía, en esa desconfianza a los poderes constituidos, pero no es una postura que me represente. Creo que es necesario dejar funcionar a las instituciones democráticas”, argumentó.
Junto a esto, reflexionó que “la Constitución del '25 se modificaba con mayoría y eso permitió que fuera flexible y adaptable y eso permitió que durara tanto tiempo. Me parece que la flexibilidad es buena si se quiere que dure mucho, pero entiendo que se resguarde vía quórum mayor que la simple mayoría. En ese sentido, yo estaría disponible para aplicar un quórum mayor”.
"Jamás pensaría que no tiene legitimidad suficiente o no será leal a la Constitución. Esos argumentos hay que dejar de lado para darle paso a la democracia", concluyó.