A sus 54 años, se debe duchar dos veces por semana por haber usado una crema con esteroides durante casi cuatro décadas. "Solo tengo que seguir adelante", comentó la afectada.
Una mujer en Inglaterra se ve obligada a aspirar su cama todas las noches debido a una afección en su piel provocada por usar cremas con esteroides que fueron recetadas por médicos.
Nicky Higgs (54), fue diagnosticada con dermatitis cuando solo tenía 10 años. Vive en el distrito de Wirral con su esposo e hija de 19 años y, según comentó a The Sun, su piel se muda al igual que una serpiente.
De acuerdo a su relato, el problema que la afecta habría sido causado por la adicción que su piel generó a las cremas con esteroides, las que comenzó a utilizar hace más de cuatro décadas, cuando le recetaron cremas con corticosteroides.
Tras eso, la mujer dejó de utilizar las cremas porque sentía que ya no le hacían efecto y comenzó a informarse sobre los síntomas de abstinencia.
En ese momento, su sorpresa fue grande al descubrir que la abstinencia de esteroides tópicos causa efectos secundarios, como ardor y descamación de la piel, además de insomnio, fatiga y depresión.
Así, en 2021, decidió no volver a usar las cremas nunca más, pese a las consecuencias que eso le trajo.
Uno de los episodios más graves ocurrió en 2020, cuando su cara comenzó a descamarse. Acudió al doctor y le recetaron una nueva crema. "Mi cara se curó rápidamente. Pero, a los pocos días, volvió", explicó.
"Leí sobre costras, supuración, enrojecimiento e hinchazón. Eran exactamente mis síntomas. Lo tenía todo. Entonces me di cuenta de que esto no era eczema. Esta fue una respuesta a la forma en que me dijeron que tratara ese problema y fue cien veces peor", detalló.
"Estuve sin nada de humectante durante tres o cuatro meses. Fue muy difícil pero, afortunadamente, estaba fuera del trabajo encerrado. Mi piel estaba súper seca y escamosa, pero luego comenzó a mejorar un poco (...) También reduje el lavado. Lavo las partes importantes todos los días, pero me ducho tal vez dos veces por semana (...) Es todo un intento de que mi piel vuelva a encontrar su equilibrio", dijo.
Además, Nicky indicó que "siento que he envejecido unos 30 años en el último año. Mi piel ahora es gruesa y arrugada. Como nadie sabe cuánto durará esto, bien podría tener casi 60 años para cuando supere esto. Pero solo tengo que seguir adelante".