En más de un 200 por ciento aumentaron, en los últimos cinco años, los casos de bebés recién nacidos afectados por el síndrome de abstinencia a las drogas y al alcohol. Niños y niñas, engendrados por madres adictas a estas sustancias, sufren por que sus madres no suspenden su consumo durante el embarazo. Esta cifra, emanada desde el Ministerio de Salud, no solo refleja los dramáticos efectos de la drogadicción en Chile, sino que evidencia una preocupante vulneración a los derechos de los niños y niñas, incluso antes de nacer...