En relación a los relatos expuestos en el reportaje de CHV Noticias y que dieron a conocer los detalles de quienes sufrieron diferentes vejaciones durante su estadía en Villa Baviera, tuvimos acceso exclusivo a la ficha que el gobierno de Patricio Aylwin manejaba sobre el cabecilla de esta organización alemana que hasta la fecha es investigada por su presunta vinculación con detenidos desaparecidos en dictadura.
Su líder, Paul Schäfer, nació en la ciudad alemana de Bonn en 1921, pero a kilómetros de su tierra natal formó parte de la historia más oscura de la dictadura de Augusto Pinochet de la mano de Colonia Dignidad, tras ingresar a Chile un 5 de enero de 1961, procedente desde Mendoza, Argentina.
Pero según los antecedentes recogidos en esta ficha, se pudo establecer una cronología desde 1966, mucho antes de que la irrupción de Pinochet en el poder, cuando el denominado "Profesor" o "Dr. Schneider" desapareció de Colonia Dignidad dejando una presunta carta suicida, dando paso a una investigación por presunta desgracia.
Aunque días después de esto, el 14 de abril de 1966, se inició un proceso en su contra por una denuncia de sodomía y lesiones graves, decretándose una semana después una orden de arraigo. Sin embargo, en diciembre de 1973 la causa fue declarada como prescrita, dictando su sobreseimiento temporal con orden de detención y arraigo vigente.
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Posteriormente, se pudo constatar que Schäfer figuraba en 1990 con un contrato en la Sociedad Benefactora y Educacional Dignidad desde comienzos de ese año, en calidad de administrador del Casino Familiar Bulnes. Aunque no sería hasta tiempo después, cuando finalmente pudo ser interrogado en tribunales de Alemania Federal, instancia en la que se recogieron inquietantes declaraciones por parte de habitantes de Villa Baviera.
Según lo expuesto en el documento, "los habitantes Villa Baviera no tienen libertad para salir de este lugar ya que se encuentra rodeado por cercos de alambre y a su alrededor existen alambradas de traspié que denuncian a cualquier persona que pretenda abandonar el sector. Para vigilar la villa existen guardias armados, los que la recorren acompañados con perros amaestrados".
"Los miembros de la colonia no tienen en su poder documentos de identidad, la correspondencia es controlada y leída, se maltrata mediante golpes de puño y pies, aplicaciones de electroshock y medicamentos a quienes se revelan en contra de alguna norma preestablecida por Paul Schäfer", agrega.
Hechos que entonces le eran imputados a Schäfer, pese a que en su declaración argumentó que dichas versiones no son efectivas, aclarando que "los cercos fueron colocados para defender el área de los daños que causaban los animales afuerinos", y en cuanto a la libertad, aseguró que "es una apreciación que debe entregar a cada uno de los habitantes", descartando también los maltratos.
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"La declaración indicada precedentemente es la única existente tanto en Chile como en el extranjero, pues el señor Schäfer no comparece a ningún tipo de citación, sea judicial o administrativa", destaca el texto.
De hecho, el 22 de enero de 1991 fue citado para notificarle personalmente sobre su privación de libertad, sospecha de detención ilegal y lesiones graves, sin obtener resultados.
Pero un antecedente más grave dice referencia con los archivos que manejaba la policía alemana respecto de Schäfer y que fueron remitidos el 10 de julio de 1987 por el Director General de la Policía de Investigaciones de Chile al ministro del Interior, asegurando que "la Oficina Central Nacional Interpol de 'Wiesbaden', informó que (...) es buscado en Alemania, desde 1961, por actos impúdicos con menores, cometidos en 1959 y 1960", además de malversación.
A continuación, la ficha completa que tenía el gobierno de Aylwin sobre Schäfer:
28/11/2021
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