El Pacto Mundial para la Migración, organizado por la ONU para los días 10 y 11 de diciembre en Marruecos, se ha transformado en el centro de la polémica, luego que se conociera la decisión del Gobierno de Chile de restarse del encuentro, cuyo tema principal es tratar las dificultados y oportunidades para los millones de migrantes que se mueven por el mundo.
La noticia generó diversas críticas, sobre todo por la situación que vive el país actualmente en materia migratoria, debido a la llegada de personas desde diversos países de Latinoamérica en la búsqueda de mejores oportunidades y que ha tenido el ejemplo más patente de la crisis con la “caravana migratoria” de personas provenientes de Honduras que caminaron a través de todo México para llegar a la frontera con los Estados Unidos.
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En este contexto social mundial, Sebastián Piñera precisó a través de su cuenta en Twitter que “Chile respeta y protege los DDHH de todos, incluyendo los migrantes. Sin embargo, el Pacto Migración ONU contradice algunos de estos principios, incentiva la migración irregular, restringe nuestra soberanía y puede perjudicar a nuestros compatriotas. Por eso decidimos no suscribirlo”, explicó.
Sin embargo, durante las horas de la tarde de este lunes, desde La Moneda emanó un comunicado oficial, profundizando en los detalles de la postura adoptada por el Ejecutivo.
“Hoy conmemoramos los 70 años de vida de la Declaración Universal de DDHH. Y quiero reiterar el compromiso de nuestro Gobierno con el respeto y la protección de los DDHH de todos, incluyendo los migrantes, en todo tiempo, lugar y circunstancia”, inicia el texto firmado por el presidente de la República.
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“Respecto al Pacto de Migración que se adoptó hoy en Marrakech”, Piñera destacó que “Chile tiene una política firme y clara en materia de migración, que apunta a una migración ordenada, segura y regular. Abierta a los que vienen a Chile a iniciar una nueva y mejor vida, a respetar nuestras leyes, a integrarse a nuestra sociedad y a aportar al desarrollo de nuestro país, y cerrada a quienes vienen a causarnos daño, como los delincuentes, los narcotraficantes, los tratantes de personas y el crimen organizado”, aclara el texto.
“Chile reconoce la importancia de la colaboración internacional, especialmente para enfrentar un desafío tan relevante como las migraciones y los DDHH. Por eso hemos suscrito diversos tratados en materia de Migración y DDHH, que Chile respeta y cumple. Sin embargo, el pacto de Migración de Marrakech contradice algunos de los principios y objetivos de nuestra política de Migración”, añade.
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Sobre las medidas locales adoptadas para enfrentar la gran cantidad de extranjeros que intentan cruzar nuestras fronteras, el mandatario puntualizó que “ya estamos aplicando la Ley de Migraciones que enviamos al Congreso el 9 de abril de este año y que ya ha sido aprobada por varias comisiones de la Cámara de Diputados. En efecto, si bien el Pacto de Marrakech no es legalmente vinculante, sus objetivos y contenido incentivan la migración irregular, establecen nuevos deberes para el Estado de Chile, restringen nuestra soberanía y pueden perjudicar a nuestro país en eventuales juicios internacionales”.
El texto concluye recordando que en marzo de este año habían más de 300 mil inmigrantes irregulares en nuestro país.
10/12/2018
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