Parricidio en Rancagua: Fiscalía baraja que madre formalizada sufriría cuadro depresivo

Durante la tarde de este martes 30 de noviembre, en la Villa Galilea de la ciudad de Rancagua, se registró un trágico caso de parricidio, que dejó a una niña muerta y a otro niño herido con riesgo vital.

Todo comenzó luego de un llamado por parte del padre de los hijos a Carabineros, acusando que su conviviente (Carla de 34 años) había atacado con un arma blanca a los pequeños.

Al llegar al lugar, Carabineros pudo percatarse que una niña de tres años se encontraba fallecida en el interior de la cocina del domicilio, mientras que el menor de 12 tenía cortes graves en su cuello, siendo trasladado de manera inmediata al Hospital Regional, lugar en el cual sigue siendo atendido.

Por su parte, la tercera hija de siete años que se encontraba en el hogar, estaba en el inmueble sin ningún tipo de heridas, ya que alcanzó a esconderse en el baño luego de escuchar lo que estaba sucediendo.

Posible cuadro depresivo

Víctor Urzúa, fiscal adjunto de la Fiscalía de Rancagua, informó que preliminarmente se baraja la posibilidad de que la madre sufría un cuadro depresivo.

No obstante, aún sin entender la motivación del crimen y con una comunidad entera consternada, algunas personas llegaron hasta el Tribunal de Rancagua para increpar a la madre que le quitó la vida a su hija de tres años.

"Señora, qué le pasó por su cabeza. Los niños no se tocan, los niños no se matan", gritó una mujer al momento que la persona formalizada por parricidio era trasladada en un auto policial.

Es relevante consignar que la detención fue ampliada por dos días (hasta el viernes 3 de diciembre) para poder dictaminar las medidas cautelares, debido a la falta de algunos antecedentes como la declaración de una de sus hijas, y los exámenes de alcohol y drogas que deben realizar a la presunta autora de los hechos.

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