Ya no solo hablamos de casas o ciudades inteligentes. Ahora se suman los espacios laborales, que requieren de nuevas herramientas para poder potenciar la productividad y eficiencia de los trabajadores. Pizarras que se conectan a los smartphones o monitores que se adecúan al espacio son algunas de las alternativas para esta innovadora forma de entender el trabajo.
Exponer las ideas frente a un grupo de trabajo, en pleno siglo XXI, no es como antes. ¿Cómo captar la atención de los trabajadores para fomentar la eficiencia y productividad? Ese es el principal desafío que hoy tienen los líderes.
Ricardo Muchnik, gerente comercial de Not Co -una compañía chilena que creó la primera mayonesa elaborada solo con ingredientes vegetales-, ha sido testigo de la evolución tecnológica en la oficina.
Recuerda que, hasta hace algún tiempo, en las reuniones utilizaban los vidrios para escribir las ideas, con plumón en mano. “Era como nuestra pizarra antigua”, confiesa. “Acá escribíamos las estrategias. Dejábamos las murallas sucias y con información confidencial”, agrega.
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En la medida que la compañía fue creciendo, fueron necesitando que sus reuniones se volvieran más innovadoras. En ese momento descubrieron alternativas tecnológicas como “Flip”, una pizarra inteligente que potencia el concepto de “oficina inteligente”.
“Este tipo de tecnologías ha facilitado las reuniones y el uso de la información confidencial, porque permite después difundirla en forma de correo electrónico”, cuenta Muchnik.
Precisamente, “Flip” rompe el esquema clásico de las reuniones de trabajo, porque impulsa una colaboración más productiva y eficiente en el grupo. Además, es muy fácil de usar: se puede conectar a cualquier dispositivo móvil y todo aquello que se escriba se puede enviar por e-mail.
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Álvaro Amar, gerente de soluciones de Samsung, explica que hoy en día se está ocupando mucho el concepto de “oficina conectada” u “oficina inteligente”.
“Si bien hay mucha tecnología, también hay que estar monitoreándola, como por ejemplo en una sala de control, donde vamos viendo múltiples fuentes y páginas web”, asegura Amar.
Para llevar adelante la vigilancia de las nuevas tecnologías, el mercado actual ofrece diversas alternativas de monitores, que incluso optimizan el uso de los espacios en el ambiente laboral.
Por ejemplo, están aquellos que van pegados a la pared y permiten una visión más extensa e integrada, y también aquellos más compactos, capaces de desplegarse en el escritorio algunas ocasiones y ahorrar espacio en otras.
Todas estas son soluciones tecnológicas que responden a los desafíos de las oficinas del siglo XXI.