Durante la audiencia de formalización del pasado viernes 23 de febrero, el femicida entregó detalles de su violento actuar que terminó con la vida de Ari Salgado.
Nuevos detalles surgieron en torno al
femicidio de Ari Salgado, luego de que el pasado viernes se realizara audiencia de formalización de
Joaquín González Barra, el autor confeso del crimen contra la joven de 23 años.
Durante la instancia en el
Noveno Juzgado de Garantía de Santiago,
se decretó prisión preventiva para González Barra, misma ocasión donde el femicida y su abogado apelaron a que lo ocurrido fue en
defensa propia del imputado.
114 puñaladas, el intento de ocultar el cuerpo, un supuesto portonazo y una argumentación del femicidio en legítima defensa, son algunos de los nuevos antecedentes del caso de Ari Salgado que se dieron a conocer durante esta jornada.
Joaquín González Barra y el femicidio de Ari Salgado
Fue el viernes 23 de febrero que en el
Noveno Juzgado de Garantía de Santiago puso en curso la formalización Joaquín González Barra por el asesinato de su polola, Ari Salgado, donde se reveló la escabrosa causa de muerte de la joven de solo 23 años.
Según el informe del SML
, fueron 114 puñaladas las que dieron muerte a Ari Salgado y tres de ellas fueron en la
arteria carótida, la cual se encarga de llevar la sangre al cerebro. Mientras que las
111 restantes se las propinó cuando su polola estaba agonizando.
En esa misma línea, la Fiscalía detalló que una de las heridas cortopunzantes realizadas por el femicida
alcanzó los ocho centímetros de profundidad, es decir, prácticamente toda la hoja del cuchillo.
El relato de Joaquín González Barra
Según lo consignado por La Voz de Maipú
, durante la formalización el
sujeto estableció una cronología de los hechos, donde horas antes del femicidio reveló haber estado en Cartagena junto a amigos, siendo ese el punto desde donde viajó hasta la
casa de sus padres para encontrarse con Ari Salgado.
Tras atentar contra la vida de su polola durante la madrugada del 20 de febrero, detalló que metió el cuerpo de la joven en un
saco color verde, el cual amarró,
lo metió dentro de una maleta blanca y finalmente la dejó bajo su cama.
05:00 horas: La coartada
Y fue a las 05:00 horas que a
Joaquín González Barra, se le ocurre su coartada. Baja al primer piso para encontrar a su papá y mostrarle una herida en su mano derecha,
asegurando que había sido víctima de un portonazo.
Tras la alarma, González Barra evitó a toda costa que su padre entrara a su habitación, quien finalmente lo lleva hasta un centro médico para que sea atendido,
donde reafirmó su versión.
Posteriormente, el joven vuelve a la casa mientras que su papá, mamá y hermana acudieron a sus respectivos trabajos a la mañana siguiente, quedando
completamente solo junto al cuerpo de Ari en su pieza.
18:00 horas: "Me mandé una..."
Y fue a las 18:00 horas que Joaquín decidió llamar a su familia para confesar el crimen expresando:
"Me mandé una cag...". Todos intentan acudir rápidamente al domicilio, siendo su hermana la primera en llegar y a quien le comentó el crimen cometido.
Posteriormente, el femicida aseguró que lo ocurrido
"fue en defensa propia. Ella me agredió primero", revelando que su herida en la mano ocurrió durante un ataque a Ari y que no se habría tratado de un portonazo.
Una vez que hacen
hallazgo del cadáver de la joven de 23 años, llaman a Carabineros para denunciar lo ocurrido.
Sin embargo, desde Fiscalía indicaron que González Barra habría tenido 8 horas para modificar la escena del crimen, donde
se evidenció su intento de limpiar los rastros del femicidio y el ocultamiento del cuerpo junto a unas sábanas.