En febrero de este año se dio a conocer un impactante caso en
San José de Maipo, el que rememoró uno de
similares características ocurrido diez años antes en la misma comuna y que
conmocionó a todo un país.
Se trata de
Arcoíris, una
secta que acaparó todos los titulares cuando la
Policía de Investigaciones (PDI) detectó la
inhumación de una guagua en las cercanías de la Reserva Coyanco.
Esta comunidad, que también estaría vinculada con
Antares de la Luz, saltó a la palestra luego de una
denuncia anónima que alertó a la policía sobre las
inusuales prácticas de sus miembros.
A casi dos meses del extenso operativo que dio con el hallazgo,
CHV Noticias accedió a un
inédito testimonio que relata el comportamiento de los integrantes que estarían detrás del sepultamiento.
"Ninguno estaba en sus cabales"
Antiguo integrante de Arcoíris, el sujeto que
prefirió optar por el anonimato habitó largo tiempo en la comunidad y
entrego inéditos antecedentes que ahora están siendo indagados por la policía y Fiscalía.
En el comienzo de su relato, confirmó que
en la secta estuvo el mismo Ramón Castillo Gaete, líder de Antares de la Luz y quien
encabezó una serie de inhumaciones ilegales en la localidad precordillerana durante la década pasada.
"Estuvo en la comunidad y fue expulsado por sus conductas", reveló. "
Le daba líquido de una botellita a ciertas mujeres, después las llevaba a su carpa y
hacía lo que quería con esas mujeres", agregó.
Sobre los otros inquilinos, el testigo
afirmó que "son personas violentas" y que
hacían "amenazas fuertes y crudas". "Maldecían a la gente que pasaba sin permiso por la comunidad.
'Vas a morir, la montaña te va a castigar', decían", señaló.
Otro de los exclusivos detalles que reveló en televisión fue que en pandemia
instauraron reglas más rigurosas que no fueron bien vistas por algunos miembros. "Entre ellas, no permitir más ajenos, el consumo de alimentos vegetales sin cocinarlos y la
prohibición de acudir a la medicina tradicional y brindar educación a los niños", explicó.
Lo anterior, teoriza,
tendría que ver con presuntos rituales que planeaban realizar. "Dicen que el bebé murió por causas naturales, pero cómo, dentro de esas 12 personas,
no hubo una sola que lo tomara, lo bajara de la montaña y lo entregara a un médico", preguntó sobre el impactante hecho que se reveló en medios.
"(Las nuevas reglas) los hicieron disvariar mucho, porque
dejar morir a un bebé por exceso de creencia... yo creo que ninguno estaba en sus cabales", sentenció en la entrevista que se emitió este martes en
CHV Noticias.