Según detalló el policía que encontró a Palmer tras el ataque, la escena fue tan cruda que creyeron que la mujer estaba sin vida. “Cuando llegamos allí, para ser honestos, pensamos que estaba muerta”, declaró. "El problema fue que no teníamos nada. No hubo testigos ni imágenes de vigilancia que nos permitieran avanzar", agregó el detective.
Inmediatamente después del aviso de Wanda, la policía arrestó a su hermano y lo acusaron de intento de homicidio por el ataque. "Él no dio ninguna pelea ni nada. Hubo un poco de sorpresa, pero no del todo", aseguró el policía que estuvo encargado de la detención.