El novio se accidentó en un derrame químico y quedó graves quemaduras, por lo que debió ser internado en la UCI a días del matrimonio. Allí, las enfermeras organizaron la ceremonia.
Si hay amor, todo se puede lograr. Al menos eso es lo que demostró una pareja en
Estados Unidos que contrajo matrimonio en la
unidad de rehabilitación para quemados de un hospital.
El novio, Preston Cobb, sufrió un accidente el pasado 30 de junio a raíz de un
derrame químico y quedó con graves quemaduras, por lo que
debió ser internado en la UCI en un hospital en Georgia. Se iban a casar el 22 de julio.
Según contó su familia en la plataforma de
GoFundMe, el hombre terminó con el
32% de su cuerpo quemado y perdió nueve dedos del pie y otros fueron cuatro amputados. Ha pasado por
ocho cirugías y se someterá a una cada semana por un injerto del piel en ambas piernas y brazos.
"La esposa de Preston, Tanesha Cobb, ha estado ahí para él,
yendo y viniendo de la casa al hospital. Ella ha estado allí para sus altibajos cuidando a nuestro héroe, nuestro amigo, un padre, un primo, un hermano y todo lo demás", explicaron sus cercanos.
La ceremonia
En medio de las visitas de Tanesha a Preston, una enfermera escuchó sus planes de matrimonio y
decidió ayudarlos.
Así, reunió a un grupo de enfermeras para
comprar comida, un DJ, flores y preparar todo el lugar, consignó
Fox Carolina.
Tras eso, les planteó la idea a ambos y los dos dijeron que sí de manera instantánea, pese a que Preston pensaba que
Tanesha no quería casarse en esas condiciones.
“No soy la misma persona que le pidió que se casara conmigo”, pensó.
Por su parte, la mujer aseguró que
"no hay nada que me impida casarme con él". La ceremonia se realizó el 22 de julio, el mismo día que tenían planeado antes del accidente.
A través de una publicación en Instagram, Tanesha compartió fotografías de la ceremonia y escribió que
"todavía se siente como un sueño".
"Esta ceremonia íntima fue algo así como
un cuento de hadas. Me casé con mi verdadero amor. El hombre que me ama, adora, protege y cuida de una manera que apenas puedo expresar con palabras. Preston Cobb, me has hecho la mujer más feliz del mundo y aunque este viaje no sea fácil... una cosa que sé es que todo valdrá la pena", añadió.