La herencia de Sebastián Piñera: ¿Cómo será repartida entre sus hijos y cómo será administrada?
El patrimonio del ex presidente incluso superaría los $2.900 millones de dólares, transformándose en la quinta persona más rica del país. Tras su muerte, gran parte de sus empresas e inversiones pasarán a manos de sus cuatro hijos.
¿Cómo se repartirá la fortuna entre los hijos de Sebastián Piñera?
La estrategia define que los cuatro hijos del ex mandatario asumirían el control absoluto de Inversiones Bancorp, creada en 1999, y que hasta febrero de 2023 administraba un capital nominal de $10.833 millones.
Se trata de una de las matrices más importantes de todas las sociedades que tiene la familia junto con Inversiones Odisea, administrada por los hijos
Por su parte, los hijos del ex presidente, en su rol de directores de Bancorp, establecieron en este acuerdo que dicha sociedad tendría una duración de 10 años a contar de la fecha de la muerte de Piñera. Es decir, la entidad funcionaría hasta el 6 de febrero de 2034.
Pero también agregaron una cláusula que permitirá su continuidad: En el documento se estableció que dicho plazo final se va a prorrogar automáticamente en periodos sucesivos de 5 años, a menos que uno de los hermanos Piñera-Morel esté en desacuerdo.
Bancorp será administrada por un directorio con cinco integrantes y la sociedad se repartiría en partes iguales entre los cuatro hijos, correspondiendo un 25% a cada uno.
Otro tema es Bancard Inversiones Limitada, la cual era controlada en un 66,8% por Sebastián Piñera.
Es más, según un documento publicado por el Diario Oficial en junio de 2023, el ex presidente había realizado una inversión de 100 millones de dólares a la Sociedad Lipanhue SpA., dedicada a inversiones inmobiliarias.
Al cierre de esta nota, se desconoce el monto oficial que recibirá cada hijo como herencia. Pero se cree que serían miles de millones de pesos para cada uno.
Quién es quién en los negocios de la familia Piñera-Morel
Inversiones Odisea es la figura que engloba aquellas administradoras y empresas en manos de los hijos de Sebastián Piñera, y que corresponden al 33,2% del patrimonio.
Por su parte, Bancard Inversiones Limitada estaba en manos del ex presidente y concentraba el 66,8% de su fortuna.
Odisea se divide en las siguientes figuras: Inversiones Bancorp, Administradora Bancorp, FIP Mediterráneo, Inversiones Santa Cecilia y Parque Tantauco. En la mayoría de ellos, los hijos Piñera-Morel ya venían desempeñando roles de importancia.
Magdalena Piñera Morel. Con sus 49 años, corresponde a la hija mayor del matrimonio que está a cargo de fundaciones y gestionar las iniciativas filantrópicas de la familia.
Se desempeña como directora ejecutiva de la Fundación Piñera Morel, directora del Parque Tantauco y presidenta de la Fundación Futuro. Además, en la esfera empresarial ejerce como directora y socia en Inversiones Bancorp, así como también en Inversiones Odisea.
Cecilia Piñera Morel. Tiene 46 años y un perfil laboral enfocado en lo académico. Es doctora especialista en Pediatría y jefa de la Unidad de Infectología del Hospital Exequiel GonzálezCortés. Además da cátedras en la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile.
Respecto de los negocios familiares, tiene el cargo de directora en la mesa de la matriz en Inversiones Bancorp.
Sebastián Piñera Morel. Tiene 42 años y saltó a la palestra en el caso Exalmar, el cual tuvo como protagonista a Piñera en 2017; y además se develó su vínculo con la Minera Dominga.
Hace más de dos años se desempeña como administrador del patrimonio familiar que bordea los 2.900 millones de dólares, siendo el director y gerente general de las sociedades Bancorp y Odisea.
Además ejerce como presidente en la Fundación Piñera Morel.
Cristóbal Piñera Morel. Tiene 40 años y es el menor de sus hermanos. Su rol se enfoca en inversiones en capital de riesgo, trabajando como socio y director de Bancorp. Además integra la junta directiva del Parque Tantauco y de la Fundación Piñera Morel.
En 2019 salió públicamente a defenderse tras viajar con su padre a China, debiendo argumentar que su estadía, pasajes y otros gastos no fueron asumidos por el Estado; junto con aclarar que su participación no tuvo influencia en materias económicas personales.
Finalmente cabe mencionar que si bien se fijó en $2.900 millones de dólares el patrimonio familiar, esta cifra incluso podría bordear los 4 mil millones de dólares si se consideran otras adquisiciones.
Entre ellas están las propiedades en Bahía Coique, Lago Caburgua y parcelas en Zapallar y Futrono. También hay oficinas en Las Condes, terrenos en Lo Barnechea y Pudahuel, así como diversas bodegas y estacionamientos en su poder.