La decisión de la ex presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unido se debe al incidente sufrido en octubre del año pasado, cuando un hombre irrumpió en su casa y lo atacó. Según contó la hija del matrimonio, "eso pesó mucho en su alma".
Fue en octubre del año pasado cuando el esposo de la ex presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos,
Paul Pelosi,
sufrió el ataque de un hombre, quien lo hirió con un martillo en la cabeza, dejándolo con una fractura de cráneo y lesiones en sus brazos y manos.
Según quedó consignado en diversos medios internacionales, las intenciones de David DePape, el atacante,
eran contra la ex presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, debido a que la consideraba una mujer corrupta.
Fue por este motivo que la ex autoridad, que dejó su cargo a inicios de este año, se sentó junto a su hija a conversar con el
New York Times acerca de las sesiones de exorcismo que realizan en su casa como una manera de excomulgar los malos espíritus, según
TMZ.
De acuerdo con la hija de la ex autoridad, Alexandra,
Nancy Pelosi comenzó a buscar sacerdotes luego del ataque que sufrió su esposo.
"Creo que eso pesó mucho en su alma", dijo Alexandra sobre su madre. Y agregó que
"creo que realmente la destrozó. Durante el Día de Acción de Gracias, (Nancy) hizo que vinieran sacerdotes para tratar de hacer un exorcismo en la casa y para tener servicios de oración".
Sobre el ataque que sufrió su esposo, la ex presidenta dijo que
le tomará unos tres a cuatro meses a Paul Pelosi poder "realmente volver a la normalidad".
Por su parte, el atacante de Paul, David DePape,
fue arrestado y acusado por las autoridades estatales y federales de intento de asesinato, intento de secuestro, robo y asalto con arma mortal.