Como si el caso no fuese lo suficientemente escandaloso, ahora todo se volcó a la policía. Esto debido a que la mujer engañada acusó a la amante de haberse quedado con las tarjetas bancarias y contraseñas del sujeto que está en coma inducido.
A sus 52 años, un bombero debió ser ingresado de emergencia al Hospital da Cassems, de Campo Grande, Brasil, tras sufrir complicaciones asociadas al COVID-19. Sin embargo, al momento de informarle esto a su esposa, le dijo que se encontraba bien y que no lo fuera a visitar ya que prontamente sería dado de alta.
Claramente la mujer no creyó en su versión, por lo que en medio de su preocupación acudió de todas maneras al recinto médico donde descubrió una increíble sorpresa. Y es que al momento de preguntar por su pareja, le indicaron que él ya estaba en compañía de su "novia".
Esta tercera persona en discordia correspondía a una amiga de ambos, quien era amante del hombre desde hacía tiempo. De hecho, según medios locales, la mujer se quedó en el lugar para prestar ayuda y, sin embargo, fue echada por su propio marido.
"A partir de hoy, ella se encarga de mis cosas. Puedes irte", le dijo.
Lee también: Nuevamente despedida entre aplausos: Anciana de 104 años se recuperó por segunda vez del COVID-19Desde ese momento, todo este caso se transformó en un tema policial. La pareja que lleva 20 años juntos, según la supuesta amante, ya estaban en un proceso de separación desde aproximadamente un año. Y que había sido entonces que ellos comenzaron su relación.
En su versión aseveró que el hombre ya solicitó el divorcio e incluso se habría llevado a cabo la primera audiencia. "Ya estoy tomando las medidas oportunas contra esta señora, por calumnia y difamación", dijo a Campo Grande News.
Pero al mismo tiempo, el problema radica en que la actual esposa acusó que esta mujer de 57 años se quedó con todas las pertenencias de su marido antes que entrara a coma inducido. Estas corresponden a tarjetas bancarias, contraseñas, celular, entre otras cosas.
Lee también: Revelan impactante registro del choque de tren en Taiwán que dejó 51 muertosPor eso, este caso está siendo monitoreado por las autoridades como preservación de derechos.
De todos modos, la mujer acusada indicó que "sus documentos, tarjetas de crédito, celular y contraseña bancaria, se quedaron con su hija mayor, no hay nada conmigo. No sé por qué está haciendo esto en un momento tan difícil para la familia. No tengo nada que ver con eso".
Finalmente, la "amante" descartó que ella haya sido amiga de la mujer afectada. Incluso aclaró que la única relación entre ellas había sido un "hola y adiós".