Las víctimas se encontraban en la calle cuando fueron acribillados por dos sujetos que llegaron en motocicleta, hecho que acrecentó la inseguridad a raíz de la ola de extorsiones en el transporte de la capital peruana.
Una cruenta balacera causó gran conmoción en Perú al dejar dos personas fallecidas y otras cuatro heridas de gravedad en el distrito de Lima.
El sangriento episodio tuvo lugar el pasado 28 de septiembre con la llegada de dos sujetos a bordo de una motocicleta al jirón Acomayo, en la capital peruana.
Allí, de acuerdo con testigos, uno de los ocupantes disparó hasta en 19 ocasiones en contra de los presentes, quienes se encontraban compartiendo y bebiendo bebidas alcohólicas en los exteriores de una bodega.
El episodio ocurrió en el marco de un estado de emergencia declarado por el gobierno de Dina Boluarte en 14 distritos de Lima Metropolitana y Callao en un intento por frentar la ola de extorsiones, informó Infobae.
La Policía Nacional del Perú (PNP) llegó hasta el lugar para realizar las pericias correspondientes y, entre las primeras indagatoria, hallaron una carta amenazante que pertenecería a los autores de la balacera.
“Para los venezolanos que extorsionan en mi barrio tienen tiempo de irse a otro lado, sino los asesinaremosa todos, culpable o inocente. Esto solo es una advertencia. Atte: Tito”, se lee en la misiva dejada tras el ataque.
Las autoridades sospechan que, al contrario de lo que indicaría el texto, se trataría de un enfrentamiento entre una banda extorsiva venezolana y otra peruana, quienes estarían peleando "la custodia" de la zona.
Fue el pasado 27 de septiembre cuando el Gobierno peruano oficializó el estado de emergencia en 14 distritos de Lima y su provincia aledaña de Callao para combatir la inseguridad ciudadana a raíz de la ola de extorsiones que ha puesto el foco en el transporte colectivo de la capital.
El estado de emergencia estará vigente por 60 días en los distritos de Ate, Ancón, Carabayllo, Comas, Independencia, Los Olivos, Lurigancho-Chosica, Puente Piedra, Rímac, San Martín de Porres, San Juan de Lurigancho, Santa Rosa y Villa El Salvador en Lima.
Bajo ese estado de excepción, la Policía Nacional mantendrá el control del orden interno con acciones de apoyo de las Fuerzas Armadas en las zonas previamente determinadas.
Además, se aplica la restricción o suspensión del ejercicio de los derechos constitucionales relativos a la inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito por el territorio nacional, libertad de reunión, y libertad y seguridad personales.