La imagen del de un niño Jesús sosteniendo una manguera y un bidón representa para los delincuentes a su protección divina cada vez que delinquen.
Los ladrones de bencina en México crearon su propio santo, al que se encomiendan cada vez que salen a cometer un delito de estas características.
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Estos delincuentes, conocidos en ese país como “huachicoleros”, utilizaron la imagen del “Santo Niño Huachicol”, similar a Jesucristo, pero en lugar de traer báculo y flores porta un bidón de gasolina y una manguera, herramientas básicas para hurtar combustible, según informó diario Ojo de Perú.
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Según destacó el medio citado, los antisociales se encomiendan al santo casa vez que salen a “ordeñar” gasolina, como se le dice a la práctica de este delito en ese país.