La artista contó cómo la TV normalizó sus problemas alimenticios, los cuáles contribuyeron a las caídas en su carrera. Comer "sandía con crema batida sin grasa" fue una de las situaciones que vivió cuando era una estrella infantil.
La cantante y actriz Demi Lovato aseguró en una entrevista que rechazó volver a trabajar en televisión al darse cuenta de que su entorno llegó a "normalizar" sus trastornos alimentarios cuando era una estrella de Disney Channel.
“Miré a mi alrededor y tuve un momento en el que pensé: 'Wow. Esto está tan terriblemente normalizado'", recordó Lovato en una conversación con la revista Bustle replicada este miércoles por medios de comunicación.
La actriz, que tuvo su primera etapa de rehabilitación en 2010 después de pelearse con uno de sus bailarines, decidió no volver a trabajar en la emisora infantil -donde rodaba Sonny With a Chance- por temor a volver a vivir esas experiencias.
"Cuando fui al tratamiento en 2010, salí con la opción de hablar sobre mis luchas y la posibilidad de ayudar a las personas o mantener la boca cerrada y volver a Disney Channel", afirmó.
La estrella, que detalló que por cumpleaños recibía "sandía con crema batida sin grasa" en lugar de un pastel de cumpleaños, también culpo a sus representantes de esos problemas.
Lee también: Investigan desaparición de actriz de “Glee” Naya Rivera en un lago de CaliforniaPor su parte, medios especializados en la industria audiovisual como Variety y The Wrap señalaron que ningún representante de la compañía respondió a los comentarios de Lovato.
Sobre su pasado como estrella infantil, Lovato confirmó en abril que no mantiene su amistad con Selena Gómez ni los tres integrantes de los Jonas Brothres, con los que protagonizó Camp Rock (2008).
"Cuando uno crece junto a alguien, siempre vas a sentir amor por ellos. Pero ya no soy su amiga", respondió a Harper's Bazaar.
Tras cerrar su etapa en Disney, Lovato tuvo que hacer un receso en su carrera con varias recaídas en las que ingresó en una clínica de rehabilitación por un sobredosis en 2018 de la que ya está recuperada y tras la que ha regresado a la vida pública.
De hecho, en la gala de los Grammy de este año, cantó por primera vez la balada Anyone, escrita días antes de su hospitalización.