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La crisis sanitaria mundial convirtió las mascarillas en un elemento obligatorio a la hora de salir a la calle. Se deben utilizar en ascensores, transporte público y supermercados entre otros lugares. Es por ello que serán imprescindibles cuando ocurra el añorado retorno a la normalidad para evitar que la propagación del virus origine nuevos rebrotes de la enfermedad
Por lo mismo, grandes casas de moda como Armani, Chanel, Louis Vuitton, Gucci o Fendi han creado sus propias colecciones, convirtiéndolas en verdaderos accesorios de lujo.
En nuestro país son varios los diseñadores que se han sumado a esta tendencia, transformado los cubrebocas en una nueva propuesta. “Mi área de vestuario murió y tuve que ver opciones, asumir la realidad y reinventarme. Pensé en mascarillas, pero algo diferente, porque en todas las esquinas venden. Tenía que ser algo con estilo y que tenga glamour”, sostiene Ricardo Oyarzún, diseñador de alta costura .
Fue así como comenzó a confeccionar mascarillas, que poco a poco se han convertido en un elemento más de nuestro estilismo diario, tal como lo son los anteojos, pañuelos y cinturones.
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“Ocupo telas impermeables, elasticadas, lavables y además vienen con un filtro interior que se le puede cambiar”, sostiene Oyarzún.
Sus diseños, publicados en Ricardoooyarzunoficial, incluyen telas con animal print, múltiples colores, lentejuelas e incluso aplicaciones. Además, agrega que tiene un pack que incluye bufanda mascarilla y gorro, todo combinado.
Otros de los artistas de la moda que se ha sumado a la tendencia es el diseñador de alta costura Nicanor Bravo. Sus mascarillas publicadas en el Instagram @turkogatuno y @nicanor_bravo son reutilizables y cumplen con las capas y filtros para prevenir contagios. “A las mujeres le gustan las de seda y con diseños entretenidos, mientras que a los hombres los más clásicos”, explica Bravo.
Para el diseñador, no son un elemento de moda porque en estos momentos no hay eventos, pero sostiene que sirven para limpiar “todo lo gris” que ha traído el COVID-19 y crear un ambiente más divertido. “Tienen entre tres y cuatro telas. Son súper seguras y tienen un alambre ajustable en la nariz”, señala Bravo.
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Pintadas a mano
Con diseños atrevidos y colores fuertes, la marca de alta costura Bad Sisters ha confeccionado un elemento de protección fiel a su estilo; es decir, trabajando con seda y manteniendo los elementos de seguridad. Son lavables, tienen tres capas de tela, dos antibacteriales, tienen filtro y posee ajuste en la nariz. Todas están pintadas a mano.
“Siempre recalcamos, no son de uso médico, pero nos informamos y le pusimos el máximo de protección. Nuestro sello son los estampados, mucho color, flores y animales”, sostiene Stephanie Byrt, una de las creadoras de la marca.
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Bechara Boroudí es un artista visual chileno-libanés que ha trabajado como asesor para múltiples marcas, pintando y realizando murales. Sin embargo, debido a la contingencia decidió comenzar con la confección de mascarillas junto un familiar. Dice que tienen triple TNT y poseen todas las certificaciones del ISP. En su instragam becharabaroudi están todos sus diseños.
Algunas son pintadas y otras son impresiones digitales de su autoría. “En cada una de las mascarillas imprimo obras de arte mías y que ya han sido vendidas anteriormente como cuadros”, dice.
La diseñadora independiente Catalina Jara tampoco se queda atrás, tiene confecciones con lentejuelas, colores militares, brillantes y lúdicas para los niños. Son reutilizables, antifluidos y están fabricadas con 3 capas entre ellas TNT y algodón con fibra de cobre, más la tela a elección. En su Instagram @cata_jaratorres están sus creaciones
“Uso diferentes tipos de telas y texturas. Lo hago para que tenga identidad y para que no nos veamos tristes y fomes”, apunta Jara.
La opinión de los expertos
Aunque este tipo de implemento son de gran ayuda para evitar contagios, los expertos son enfáticos en señalar que las mascarillas de género protegen "algo" pero no aseguran cuánto.
"No hay ningún estudio real que diga que son realmente protectoras, algo filtra, pero las medidas realmente efectivas son el aislamiento, estar una distancia mínimo un metro de otra persona y lavarse las manos", sentencia Ximena Rebolledo, académica de la Escuela de Enfermería UDP y experta en infecciones en atención primaria.
La profesional asegura que mientras más grueso y poroso sea el material, mayor es la seguridad. Dice que la idea es mantenerlas muy pegadas a la cara y no tocarlas para evitar que se contaminen.
¿Se convertirá la mascarilla en nuevo complemento de moda? Esa la pregunta que se están haciendo varios. Por ahora su uso es obligatorio y los diseñadores aseguran que además de proteger, buscan contribuir a dar un poco de alegría en medio de tanto sufrimiento por el COVID-19.
20/05/2020
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