Un clásico de la transición a la democracia. El humorista, que se presentará este 2019 por séptima vez en el Festival de Viña del Mar, hizo reír a toda una generación y aunque hoy el humor ha cambiado, pocos pueden negar que algunas de sus ocurrencias son ya patrimonio del país.
El humor es uno de los momentos más esperados por el “Monstruo” en el Festival de Viña del Mar, donde el público tiene la potestad para alabar o lapidar la carrera de un comediante.
En la versión del 2019 pisarán el escenario de la Quinta Vergara grandes exponentes, tales como Felipe Avello, Jorge Alis, Jani Dueñas, Dino Gordillo, entre otros. Este último, se presentará por séptima vez en el certamen.
La década de los '90 fue la época dorada para Dino Julio Guzmán Gayoso (58). El humorista se presentó cinco veces consecutivas entre 1996 y el 2000, todas con un gran éxito.
El comediante estará el lunes 25 de febrero, donde compartirá escenario junto al cantante español Raphael y la artista mexicana Yuri. El público de esa noche serán prácticamente los mismos que en dicha época disfrutaron con sus rutinas.
Luego de sus shows consecutivos en la Quinta Vergara pasaron varios años para que volviera a pisar el mismo escenario. Fue recién en el 2011 cuando Gordillo regresó para presentarse por sexta vez.
De eso ya han pasado ocho largos años donde poco se ha sabido del humorista. Alejado de la televisión y centrado es espectáculos privados, pretende volver a cautivar al público con sus divertidos chistes.
En la previa de su séptima participación en Viña, te mostramos 5 chistes que te hicieron reír pero que quizás, no te acordabas.
1. Los condones del abuelito
- Llega un abuelito a una farmacia y dice “vengo a reclamar: anoche compré dos preservativos y venían malos”. “¿Por qué?”, le responde el farmacéutico, “¿se le rompieron?”, le pregunta. “No, se me doblaron”, dijo el anciano.
2. El huaso talador
- Llega un huaso luego que viera un aviso en el diario donde se solicitaba cortar un bosque en forma urgente. Llegó con un hacha. “Son 4 hectáreas llenas de eucaliptos, ¿cómo lo vas a hacer solo?", le pregunta el jefe. “Yo soy huaso”, le responde. En medio día hizo todo el trabajo y hasta apiló los palos. El jefe asustado le pregunta, “¿y adonde aprendiste a cortar árboles?”. “En el Desierto de Atacama”, le responde. “¿Pero cómo? Si allá no hay árboles”, dice el jefe. “Ahora no hay, po'”, respondió.
3. Cortinas pa' que no mire el vecino
- Una mujer le dice a su marido: “Mi amor, ya no aguanto más. Cada vez que me baño el vecino de al lado me queda mirando. Yo creo que vas a tener que comprar cortinas”. El hombre le respondió: ”Tsss, espérate que te vea bien y las va a comprar él”.
4. “¡¿Estas son horas de llegar, desgraciado?!”
- Llega el marido a las 4 de la mañana borracho a su casa y la mujer le dice: “¡¿Estas son horas de llegar, desgraciado?!”. “¿Cómo que llegar? Si vengo a buscar la guitarra”, le respondió.
5. Los suspiritos
- Tres hermanas ancianas que no habían “pisado el palito” decidieron ir a un hogar para encontrar pareja. La mayor les dice que se fueran a la pieza con un viejito y por cada “suspiro” tenían que lanzar un un balde de agua por la ventana. La primera hermana tiró un balde, un suspirito. Fue la segunda lanzó dos baldes. Las otras dos lanzaban challas y serpentinas. Se fue a acostar la última y pasaron 4 horas. 60 baldes salieron por la ventana. Las hermanas estaban rezando. Al otro día se juntaron a desayunar y empezaron a conversar. “¿Por qué tantos baldes?”, le preguntaron: “Están locas. El viejo se me hizo y tuve que baldear la pieza”.