El cantante fue portada de la última edición de la revista Vogue junto a su esposa, Hailey Baldwin.
Luego de meses en silencio, el canadiense Justin Bieber (24) habló por sobre su matrimonio con la modelo Hailey Baldwin (22).
En la conversación, la joven pareja se refirió su nueva vida como marido y mujer, los conflictos que han tenido que sortear, y el irrevocable acercamiento a Dios del cantante, devoción que lo impulsó incluso a no mantener relaciones sexuales con Baldwin antes del sacramento.
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El intérprete de "What do you mean" confesó haber experimentado una "adicción legítima al sexo", la cual decidió tratar para encontrarse más apegado a sus convicciones religiosas.
"Creo que el sexo puede causar mucho dolor. A veces las personas tienen relaciones sexuales porque no se sienten lo suficientemente bien. Porque carecen de autoestima. Las chicas hacen eso, y los chicos hacen eso. Quería volver a dedicarme a Dios de esa manera porque realmente sentía que era lo mejor para mi alma. Y creo que Dios me bendijo con Hailey. Te recompensa por un buen comportamiento" sostuvo Bieber en exclusiva con Vogue.
Si bien, afirmó el mismo artista, que el sexo fue uno de los motivos para apresurar el casamiento, esa no fue la gran razón: "Cuando la vi en junio, simplemente había olvidado cuánto la amaba, cuánto la echaba de menos y cuánto impacto positivo tuvo en mi vida. Dije: 'Esto es lo que he estado buscando'".
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En la entrevista, Justin se refirió igualmente a los episodios más oscuros de su carrera. "Las drogas pusieron una pantalla entre mí y lo que estaba haciendo (...) Creo que hubo momentos en que gente de mi equipo pasaba a mi habitación por la noche para controlar mi pulso y ver si aún respiraba".
Los enamorados están, en palabras de Mrs. Bieber, "construyendo una relación sana" ya que "somos dos jóvenes que aprendemos sobre la marcha. No me voy a sentar aquí a mentir y decir que es una fantasía mágica".