Un verdadero delivery carcelario fue desarticulado en Valdivia. Los reclusos realizaban sus pedidos telefónicos desde el interior del penal y desde el exterior, la banda organizada como un próspero emprendimiento, satisfacía sus demandas en cosa de minutos con todo tipo de productos, desde hamburguesas, drogas y teléfonos móviles. El informe es del periodista Fabián Acevedo.