Se trata de aplicaciones que instan a probar suerte en juegos de azar y que muchas veces otorgan enormes ganancias a los jugadores, a quienes se les ofrece la posibilidad obtener dinero fácil desde sus teléfonos, pero que están atadas a negocios fraudulentos.
Preocupación causa la irrupción de los casinos online y sitios de apuestas web luego de que usuarios comenzaran a denunciar numerosos problemas. Este tipo de servicios no está regulado por la ley, lo cual deja a las autoridades con pocas herramientas para poder defender a quienes se sientan engañados. Se trata de aplicaciones que instan a probar suerte en juegos de azar y que muchas veces, otorgan enormes ganancias a los jugadores, a quienes se les ofrece la posibilidad obtener dinero fácil desde sus teléfonos, pero que están atadas a negocios fraudulentos. Parece fácil y la pandemia hizo aún más populares este tipo de apps, en las que los usuarios invierten dinero y recaudan importantes saldos, pero que luego no pueden retirar. En otros casos, las personas que hicieron apuestas recibieron la transferencia comprometida, pero posteriormente estas fueron anuladas y quedaron igual o peor que al inicio. El problema con respecto a estas situaciones es que el juego online en Chile es absolutamente ilegal, por lo cual no existe ningún grado de fiscalización. El llamado es a no participar en este tipo de pasatiempos virtuales.