El general Javier Iturriaga rechazó vivir en la mansión, ubicada en un recinto de 80 mil metros cuadrados en Lo Curro, construida en plena dictadura por Augusto Pinochet y Lucía Hiriart en medio de la crisis de los '80. En dicho recinto han vivido diferentes generales, por más de 20 años ha sido ocupada para alojar a las máxima autoridades militares y cuenta, entre otras cosas, con helipuerto y estacionamiento privado para cerca de 40 vehículos. Actualmente, el general en retiro Ricardo Martínez fijó esa residencia para declarar ante la ministra Rutherford.