Más allá del análisis geopolítico del conflicto entre Ucrania y Rusia, lo cierto es que se trata una guerra que, en beneficio de las fuerzas rusas, es bastante desigual. Así lo considera el ex diplomático y analista internacional Samuel Fernández, quien afirma que "es una desproporción muy grande, porque es más o menos de 4 a 1. Estamos en presencia de la segunda potencia mundial militar, que es Rusia, que además tiene poderío atómico". En ese sentido, Rusia marca una diferencia considerable en tropas, armas, tanques, aviones e infraestructura, es desmedro de un país pequeño como Ucrania.