El pasado 1 de febrero los hijos de Nabila Rifo dieron muerte a su conviviente, quienes además entregaron su relato a las autoridades de lo sucedido. ¿Cómo ocurrió el asesinato? Aquí los detalles.
El viernes 2 de febrero fue cuando se concretó la
detención de los hijos de Nabila Rifo, quienes asesinaron a la pareja de su madre,
identificado como Ignacio Gerardo Bañares.
Los hechos se habrían suscitado 1 de febrero en casa de Rifo, después de que Bañares ingresara al domicilio
en estado de ebriedad, gritando nombre de Nabila y lanzando piedras. El sujeto habría protagonizado
constantes episodios de abuso en contra la mujer.
Desde ese momento,
solo bastaron 15 minutos para que Bañares terminara agonizando en el antejardín. 30 golpes, un bate de béisbol, una manopla y los hijos de Rifo fueron parte de la escena que se encontró la policía al llegar al lugar.
¿Cómo ocurrió el asesinato de Ignacio Bañares?
Cronología del asesinato de la pareja de Nabila Rifo
Según lo consignado por el medio
Radio Biobío, el 1 de febrero del 2024, Bañares salió cerca de las 19:00 horas de la casa que compartía con Nabila Rifo y sus hijos, con el objetivo de
conseguir una camioneta.
Y no fue hasta dos horas después, cerca de a las 21:17 horas, que Bañares volvió a casa gritando, en
estado de ebriedad, lanzando piedras y en busca de Nabila.
"Gerardo entró por el portón hasta el patio y decía: '
Quiero buscar a mi mujer', declaró Rifo ante la PDI. Acto seguido, uno de sus hijos identificado como F. le comentó a su madre: '
Ahí está tu maridito, te está rompiendo la casa'".
Nabila rápidamente procedió a llamar a Carabineros, mientras que sus hijos F. y J. lo dejaban entrar, instante en que uno de ellos escuchó previamente que su madre habló por teléfono con Bañares, asegurándole que
no tenía permitido volver a la casa.
La manopla: "Te voy hacer mier..., cabro culi... "
De acuerdo al testimonio del joven, durante el enfrentamiento,
F. le pidió a la pareja de su madre que se calmara, lo cual solo causó más furia en él. En ese momento Bañares mantenía una piedra en su mano derecha amenazándolo, la cual finalmente lanzó en dirección a una bodega de la casa.
En un escenario que se ponía aún más álgido, F. se
dirigió hasta el cajón de su pieza para buscar una manopla que tenía guardada y volvió a salir al antejardín para continuar el enfrentamiento.
En ese momento, Bañares lo amenaza:
"Te voy hacer mier... cabro culi... ", expresó antes de agredir a F. con una piedra en su brazo derecho, quien rápidamente procedió a cubrirse la cara para evitar los golpes.
El bate: "Pensé que me podía matar"
Tras concretarse el primer ataque de Bañares en contra de F. -hijo de Nabila-, el joven declaró su sentir en dicho momento, donde continuó con un intercambio de golpes.
"Fue en ese instante en que
pensé que me podía matar y decidí golpearlo con la manopla. Pero al retroceder un poco tropecé con los peldaños de la escalera y caí de espalda. Quedé en una postura inclinada y
Gerardo se abalanzó sobre mí para golpearme, iniciándose un intercambio de golpes".
Su hermano J. se percató de la situación y
se puso por detrás de Bañares para golpearlo en la cabeza con un bate de béisbol, acción que permitió a F. levantarse y
ponerse encima de él para continuar la golpiza con la manopla en su rostro y cabeza.
"Debido a la adrenalina, la situación que estaba viviendo, sumado a que pensaba que si no me defendía Gerardo me podía matar.
Es que le di una gran cantidad de golpes con la manopla, todas en el rostro y cabeza", relató F.
De acuerdo a la información de Fiscalía,
la pelea tuvo una duración de 15 minutos, donde en solo dos de ellos Ignacio Gerardo Bañares
recibió 30 golpes, siendo 13 con el bate de béisbol y los 17 restantes con la manopla.
La desesperación de Nabila: “¡¿Qué hicieron?!”
Tras ver a bañares ensangrentado, ambos jóvenes huyen del lugar en dirección a la casa de su padre, mientras Nabila Rifo era testigo de la escena y les gritaba desesperadamente:
“¡¿Qué hicieron?!”.
En ese momento, Nabila se sentó al lado del cuerpo de Bañares completamente
shockeada, presenciando cómo agonizaba en el antejardín.
El actuar fue explicado por J. quien reveló en su testimonio: "Yo tenía miedo y adrenalina.
Creía que Gerardo podía volver a levantarse, por lo que nos fuimos a casa de mi padre que vive a dos cuadras".
El padre de los hijos de
Nabila Rifo decidió llevarlos a la policía, donde solo el mayor decidió entregarse mientras que el otro retornó a la casa de su madre, lugar al que horas más tarde llegaría la PDI para concretar su detención.
En paralelo, el cuerpo de Ignacio Gerardo Bañares era puesto sobre una camilla del Servicio Médico Legal (SML),
quienes confirman su muerte por politraumatismo a las 00:59 horas.