Cada vez son más las personas que trabajan con las redes sociales, lo que se ha convertido en un verdadero empleo a tiempo completo. Este fenómeno, sin jefes, ni horarios ni oficinas, en algunos casos genera altos ingresos, lo que actualmente está en la mira del Servicio de Impuestos Internos (SII). Este año cerca de dos mil influencers estarán obligados a presentar una declaración de renta. El año pasado a casi 400 de ellos les correspondió pagar impuestos, registrando un monto cercano a los $900 millones de pesos.