La medida extrema comenzará en la Penitenciaría, pero esperan que se extienda a otros centros penales. Por su parte, el gobierno estaría amenazando con descuentos y sumarios a los trabajadores movilizados.
A cuatro días de iniciado el paro nacional de Gendarmería, los funcionarios decidieron radicalizar su postura. A partir de este jueves comenzaron con “huelga de hambre total” en la Penitenciaría de Santiago, una medida que esperan se replique en otros centros penales del país.
Esta decisión se suma a las anunciadas el martes, como la prohibición de ingreso de imputados y la salida al exterior de internos, solo exceptuando situaciones de salud y emergencias que ameriten la derivación a centros asistenciales.
A través de un video, el secretario nacional de la Anfup y vocero del Frente de Trabajadores Penitenciarios, Marcos Aburto, afirmó que esta decisión se debe a la falta de acuerdos con el gobierno de Sebastián Piñera.
Según informó radio Bio Bio, desde La Moneda no pretenden continuar con las negociaciones mientras sigan las radicalizaciones.
Pese a ello, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, llamó a continuar con el diálogo. “Aquí es importante conservar la calma. Estamos todos interesados en mejorar las condiciones de Gendarmería. Y más que seguir el camino y extremar recursos duros o expresiones violentas, yo quiero invitar a los dirigentes de Gendarmería a que sigamos dialogando”, afirmó el ministro.
Por su parte, el mismo medio aseguró que desde el Ejecutivo amenazan con descuentos salariales y sumarios administrativos contra los trabajadores movilizados.