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La cuarentena en La Granja ha traído una nueva ola de robos en el jardín infantil Mi Capullito: solo este año ya van 6. Un lugar donde llegaban, antes de la emergencia sanitaria, más de 100 niños de familias vulnerables de toda la comuna.
Pero eso poco parece importante a un grupo de saqueadores que durante las últimas dos semanas entró tres veces al establecimiento, destruyendo incluso los baños para robar cañerías de cobre.
Los problemas son varios. El primero es que el recinto no cuenta con cámaras, ni guardias, por lo que estos días permanece deshabitado. El segundo es que temen realizar las denuncias correspondientes por miedo a represalias. Incluso, cada vez que llegan carabineros, no pueden obtener mayores antecedentes de quienes cometen estos delitos.
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Sin embargo, a través de procesos investigativos, el comisario de la unidad policial de La Granja, el teniente coronel Claudio Landeros, nos detalla que "se trataría de personas que son vecinos del sector Capullito, personas que viven en los alrededores y han ingresado con la finalidad de sustraer algunos artículos como cilindros de gas y calefón".
Ocultando su identidad, una funcionaria del jardín infantil Mi Capullito realizó la denuncia a CHV Noticias y detalló que "ahora destrozaron los baños para llevarse el cobre" y luego afirma que "el 27 de mayo había sido el último robo, pero este fin de semana fue la sexta vez, aunque nadie quiere hablar por las amenazas".
Desde la Municipalidad de La Granja creen que, pese a que el recinto depende de la Junji, podrían ver la forma de ayudar a prevenir un nuevo robo.
"La verdad es que los delincuentes no respetan absolutamente nada, el tema de los asaltos y los robos que ha sufrido este jardín infantil, El Capullito, es uno más de los que han realizado en ese sector. Falta presencia de la policía, falta presencia de carabineros. Lo cierto es que hoy necesitamos preocupación de todos, lo lamentamos porque se roba a niños que están en situación de vulnerabilidad", concluye el alcalde Felipe Delpín.
Para carabineros este tema es focalizado en el Jardín Infantil Mi Capullito, ya que no se ha detectado un aumento de robos en lugar no habitado durante la cuarentena comunal y el toque de queda.
"Estamos permanentemente coordinados con la oficina de seguridad de la Municipalidad de La Granja para atender todos estos casos y requerimientos de la comunidad, pero se ha hecho un poco complicado al no tener contacto con las personas que están a cargo del citado jardín, toda vez que está se encuentra deshabitado desde el comienzo de la cuarentena", finaliza el teniente coronel Landeros.
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Con nuevas medidas de seguridad, todas las instituciones pretenden cooperar para evitar futuros saqueos a este recinto, que ya ha sufrido suficientes daños y que cuando termine esta pandemia deberá recibir otra vez a un centenar de niños de familias de escasos recursos, padres para quienes es fundamental que el jardín infantil esté en perfecto funcionamiento, ya que muchos trabajan todo el día y ponen toda su confianza en el cuidado de sus hijos a las profesionales de Mi Capullito.
10/06/2020
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