Los padres de la menor atribuyen la responsabilidad de la muerte al personal de salud del Hospital regional de Coyhaique. Desde el centro de salud aseguran que no hubo quiebre en la atención ni falta de recursos. Todo está en manos de la Fiscalía Regional.
Angustiada está la familia de la pequeña Alisson Raimapo (5), quien murió en julio en el Hospital Regional de Coyhaique tras una serie de atenciones y altas, con diferentes diagnósticos. Los padres de la pequeña acusan una posible negligencia médica y ahora, a tres meses de esa dolorosa pérdida, lo único que piden es que se haga justicia.
"Yo pedí explicaciones por todas partes y nunca me dijeron nada. Incluso le pregunté a una doctora que había pasado con mi hija y me dijo que era una falta de respeto que le pidiera explicaciones", cuenta angustiado Rodrigo Raimapo, padre de la pequeña".
La familia asegura que Alisson era una niña sana, por lo que siguen sin entender qué ocurrió. Dicen que harán lo que sea por saber la verdad. "Fueron tres veces en las idas y venidas del hospital, y después los médicos dijeron que era muerte cerebral y que ya no había nada más que hacer", señala Pauly Gutiérrez, asistente de párvulos del Colegio Alborada y quien conocía muy bien a la pequeña.
Como nunca, la familia obtuvo una respuesta satisfactoria. El padre de la pequeña nos cuenta que enviaron los estudios a un laboratorio en Santiago, pero todavía no tienen los resultados. En estos momentos, la causa está en manos de la Fiscalía de Coyhaique, quien inició una investigación de oficio luego que el caso se hiciera público.
"Cuando surgieron los antecedentes, por los medios, de que existía una situación de una niña pequeña con muerte cerebral, en el hospital se inició una investigación por parte de la Fiscalía, encargándose diligencias a la brigada de homicidios", explicaba en el mes de julio el fiscal José Moris.
Durante esta jornada, desde la Fiscalía señalaron que la causa se sigue investigando y que se pidieron diligencias al Servicio Médico Legal.
"Nosotros queremos respuestas porque Coyhaique también es parte de Chile, y pedimos que salga en todas las redes sociales porque no sería el único caso", asegura Gutiérrez, tía del colegio. La mujer agrega que el recinto de salud es la única alternativa en la zona y que con lo que pasó siente inseguridad de acudir al lugar.
"Yo todos los días le pido a dios que me cuide a mis hijos, porque no me gustaría llegar a ese hospital", sentencia la cercana a la familia.
Ante nuestra solicitud de entrevista, desde el centro de salud señalaron que luego del lamentable fallecimiento, se requirió una auditoría médica con el objetivo de establecer si había habido algún quiebre en el proceso de atención o carencia de algún recurso.
"Nos interesa mucho determinar las causas por la cual se produce esta falla multisistémica de manera tan abrupta. El resultado es que no encontramos ninguna condición de quiebre en la atención, ni carencia de recursos asociados a la atención que se le dio a la menor", señala Jaime López Quintana, director del Hospital Regional de Coyhaique.
El profesional agrega que al judicializarse la situación, ellos no pudieron hacer la autopsia y el encargado fue el Servicio Médico Legal, y esa información es parte del proceso investigativo. Desde el centro de salud informaron además que a la menor se le realizaron dos exámenes PCR y pruebas serológicas (IgG e IgM) que también resultaron negativas.
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En medio de todo el proceso, el padre de la pequeña dice que agotará todos los recursos legales para obtener la respuesta que tanto necesitan. Por ahora, seguirán esperando los resultados de los estudios que se enviaron a Santiago y que podrían tardar varios meses.
"Era una niña muy tierna, era humilde, era muy amigable. No sé cómo expresarlo porque era una niña muy linda y yo aún no puedo creer que ella esté muerta", cuenta con voz entrecortada Gutiérrez. "Yo lo único que quiero es que se haga justicia y que sepa por qué pasó", dice entre lágrimas el padre de la pequeña.