Estuvo 20 años en la cárcel condenada por matar a sus cuatro hijos. Pero gracias al trabajo de un equipo de científicos, fue indultada. Esta es la historia de Kathleen Folbigg, una mujer australiana que quedó en libertad después que una investigación concluyera que las guaguas murieron de forma natural. "Estoy más que feliz", expresó.