En conversación con CHV Noticias, Kathy Greene, una chilena radicada en Turquía, relató cómo vivió el terremoto en la ciudad de Konya, la cual se ubica a 3 horas del epicentro. Comenta que en un comienzo estaba tranquila, pero con el pasar de los días y al ver el nivel de destrucción, el miedo fue aumentando. "De alguna manera tratamos de transmitir lo que nosotros sabemos", indicó Kathy, quien comparte con otro grupo de chilenos. Asimismo, confesó que lo más difícil ha sido recibir a los menores de edad que quedaron huérfanos. "Llegan buses completos con niños sin familia y eso es super fuerte".