La decisión fue adoptada por el Poder Judicial peruano por el caso de Ana Estrada Ugarte, de 44 años, quien padece de polimiositis, ha aclarado que no quiere morir y que su lucha es por la posibilidad de elegir.
#Importante. Poder Judicial reconoce derecho de Ana Estrada a una muerte digna por eutanasia. Lea la nota: https://t.co/ETA4EV7zWn pic.twitter.com/Lqkv044bjv— Poder Judicial Perú (@Poder_Judicial_) February 25, 2021
La eutanasia no está permitida Perú. Sin embargo, la sentencia reconoce y autoriza por primera vez en la historia del país el derecho de una persona a terminar con su vida. El Ministerio de Salud, que tiene un plazo legal de 72 horas para apelar, aún no se ha pronunciado públicamente ante el fallo.
Poco después de conocerse el fallo, Estada expresó en su cuenta de Twitter su satisfacción por la decisión. También su agradecimiento al juzgado «por la sentencia a favor de mi libertad». Así mismo agradeció a personal de la Defensoría del Pueblo y a su familia.
Lee también: EE.UU. atacó estructura de milicias respaldadas por Irán en Siria, por orden de Biden«Dedico este primer logro a las que no se les escucha. A las niñas, adolescentes y mujeres que tienen que callar o han callado. A las madres, hermanas, hijas y amigas de las que mataron o desaparecieron. ¡Justicia para todas!», agregó.
Gracias al 11° juzgado por la sentencia a favor de mi libertad. Al Dr. @WGutierrezPE por defender mi derecho junto a @Josefina_28 y Percy Castillo. A Malú, Jessie y todo el equipo de la @Defensoria_Peru que me acompañan con alegría y cuidado.— Ana Estrada (@anaestradau) February 25, 2021
Estrada, de 44 años, padece de polimiositis, una enfermedad degenerativa que la mantiene en una cama en su casa, con cuidados médicos las 24 horas del día y conectada a un respirador durante las noches. Ahí está desde que abandonó la unidad de cuidados intensivos de un hospital en 2015, a donde había ingresado debido a la enfermedad que padece y que le fue diagnosticada de niña.
Los efectos de esta sentencia solo son aplicables a Ana Estrada, según Josefina Miró Quesada, parte del equipo legal de la Defensoría del Pueblo. Esta institución presentó a inicios del año pasado un recurso ante el Poder Judicial para que se le permita a Ana Estrada la muerte asistida cuando su condición sea insostenible. El Código Civil peruano penaliza este tipo de acciones y la Defensoría solicitaba que ello no se aplicara en su caso.
«Esta es la primera instancia pero podría ser la definitiva si las procuradurías de los ministerios de Salud y Justicia, y EsSalud deciden no apelar», afirmó Quesada. Agregó que confiaba «en que ello no ocurra porque las instituciones, en tanto Estado, deben estar en línea con los derechos fundamentales, y los procuradores en tanto defensores del Estado debería adherirse a ello».
La pandemia fue especialmente difícil, según la propia Estrada, pues conseguir el oxígeno que requiere dada su condición se convirtió en un reto. Ella siempre aclaró que no quiere morir y que su lucha, antes de ser un alegato por la muerte, lo es por la vida, por la libertad de elegir. Según escribió en su blog «esta búsqueda por la muerte se convirtió, paradójicamente, en una motivación para vivir».