El aterrador momento quedó registrado en un video y se viralizó a través de las redes sociales. Debido a la expansión del fuego y el aumento de focos de incendio, las personas de ese sector no tenían muchas opciones para realizar la evacuación.
Un terrible momento vivió una familia de la comuna de Santa Juana, en la región de
Ñuble, luego de que un
incendio llegara hasta su casa, en el contexto de las catástrofes que se viven en la zona, frente
al cual decidieron meterse en la piscina para sobrevivir.
El dramático registro se viralizó por redes sociales y generó impacto por lo aterrador de la escena, donde se oyen los gritos desesperados de la familia y se ve cómo el cielo se va tornando oscuro a causa de las llamas.
Y eso mismo fue lo que relató John Sanhueza, uno de los protagonistas, en conversación con
LUN.
"Parece de noche, pero pasó de día. Fue a las dos y media de la tarde", comentó el hombre de 33 años al medio citado.
"Agáchense hasta el cuello", se escucha decir a Yerko Cortés, tío de John Sanhueza y quien graba el video, en un evidente intento por tranquilizar a una mujer y una pequeña que lloran atemorizadas mientras el fuego se va acercando.
La familia, como muchas otras personas,
decidió quedarse en su casa a pesar de que los incendios ya azotaban ese sector desde el pasado jueves.
"Llegó la alarma de evacuación como por el mediodía del viernes, pero la gente no quiso dejar sus casas. Además,
el riesgo entre quedarse en la casa y arrancar era el mismo, porque estamos muy lejos de la carretera, a más de 10 kilómetros", contó John Sanhueza.
Entonces Sanhueza salió en una camioneta junto a unos amigos que lo fueron a ayudar
para comprar combustible para un generador y así lograr lanzar agua a las casas para aplacar el fuego.
Sin embargo, a mitad de camino,
quedaron atrapados por las llamas entre dos focos de incendios, del cual uno de ellos fue el que quemó la casa, que quedó totalmente calcinada.
Mientras John Sanhueza buscaba refugio en la entrada de una forestal,
su tío Yerko veía cómo sus vecinos intentaban arrancar de las llamaradas en sus vehículos.
"Vi que la vecina, junto a sus papás y sus hijos, estaban saliendo en la camioneta tratando de arrancar. Pero mi sobrino ya me había avisado que más abajo había otro foco de incendio.
Había fuego por todos lados, no podíamos salir a ninguna parte. Así que les dije que mejor se entraran a la casa y se metieran a la piscina", relató Yerko Cortés.
El aterrador momento duró alrededor de una hora. "Y una vez que pasó, quedó el humo y empezamos a ahogarnos. No podíamos respirar. Dos horas después llegó a buscarnos el hijo de una vecina en una camioneta y nos fuimos", agregó Yerko Cortés.
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"Para no contarlo, el fuego pasó por encima de nosotros. Se nos quemó todo", complementó.
Yerko lamenta profundamente la pérdida de sus animales. "Tenía 40 aves, entre pollos y gallinas, cuatro gatos y dos perros: Rambo y Guardián. De todos ellos, solo sobrevivió Guardián, que se metió conmigo a la piscina. Al Rambo no lo pude encontrar, no se dónde estará. Pobrecito", dijo con pesar.
Ya en un lugar seguro, desde la casa de una tía en
Coronel, John Sanhueza cuenta que
"estamos traumados todavía. Lo único que nos queda es empezar la limpieza. No queda otra que seguir trabajando para recuperar todo lo que se perdió, todo el sacrificio, el esfuerzo y la inversión que había en esas casas".
"
Si alguien quiere ayudar, se necesita palas y herramientas para la limpieza. Ayuda también, pero tiene que ser gente especialista, con sus elementos de protección", cerró.