Los cruzados sumaron su cuarta derrota en el certamen tras caer ante Talleres en San Carlos de Apoquindo. Pese a esto, lograron un premio de consuelo y seguirán jugando a nivel internacional.
Universidad Católica concluyó este martes por la noche su participación en la Copa Libertadores con una nueva derrota, luego de que cayeran 1-0 ante Talleres de Córdoba en San Carlos de Apoquindo.
Los cruzados entraron a la cancha sin la chance de clasificar a los octavos de final, pero sí con la misión de asegurar su cupo en la Sudamericana y también mejorar la mala imagen que han dejado durante todo el semestre.
Sin embargo, nuevamente hubo bajísimos rendimientos en los jugadores y el elenco de Ariel Holan se vio superado en gran parte del primer tiempo por los argentinos, quienes ya habían vencido a los de la franja en el duelo de ida.
En el segundo lapso la UC mejoró y logró quitarle el balón a los trasandinos, aunque sin generar demasiadas ocasiones de peligro. Fue así como a los 61 minutos el volante Matías Esquivel sacó un tremendo zurdazo que batió a Sebastián Pérez, logrando el único gol del encuentro.
Desde ese instante, los estudiantiles buscaron con más ganas que fútbol al menos el empate, pero lamentablemente para ellos Fernando Zampedri no estuvo fino y los ingresos de delanteros como Diego Valencia y Lucas Melano prácticamente no aportaron en nada.
Pese a la derrota, los cruzados lograron milagrosamente acceder a la Copa Sudamericana tras terminar terceros en su grupo, ayudados por la victoria de Flamengo ante Sporting Cristal en Río de Janeiro.
De igual modo, Católica quedó como el peor tercero de toda la Copa Libertadores con solamente cuatro puntos en seis partidos.